El grupo chileno Antofagasta Minerals, uno de los principales actores de la industria minera global y parte del holding Grupo Luksic, ha anunciado su interés en expandir operaciones en Sudamérica, con énfasis en Ecuador y Argentina, consolidando así su estrategia de crecimiento internacional. La empresa ya cuenta con operaciones en Perú y Estados Unidos, y se encuentra entre los diez mayores productores de cobre del mundo.
La nueva etapa contempla desarrollos cupríferos en zonas estratégicas del continente, con foco en inversiones a gran escala.
Ecuador: prospecciones en el proyecto Tres Cerrillos
En territorio ecuatoriano, el plan contempla el avance de campañas de perforación básica y de seguimiento en el proyecto Tres Cerrillos, el cual ya se encuentra en marcha. Esta etapa de exploración tiene como objetivo determinar el potencial del yacimiento y evaluar su viabilidad para futuras fases de desarrollo minero.
Este movimiento busca consolidar presencia en un país que, en los últimos años, ha mostrado un creciente interés por abrirse a la inversión extranjera en minería, impulsado por la demanda internacional de cobre y otros minerales estratégicos.
Argentina: inversión millonaria en El Pachón
En paralelo, Antofagasta Minerals también evalúa una importante inversión en Argentina, específicamente en el proyecto El Pachón, propiedad de Glencore y ubicado en la provincia de San Juan, muy cerca de la frontera con Chile y a la misma altura geográfica del yacimiento Los Pelambres.
Este proyecto contempla una inversión aproximada de US$ 6.000 millones y se trata de un yacimiento de cobre y molibdeno, situado a una altitud que oscila entre 3.600 y 4.200 metros sobre el nivel del mar.
Actualmente, El Pachón se encuentra en etapa de estudio de factibilidad y desarrollo de un Informe de Impacto Ambiental, según detalló el Diario Financiero. No obstante, el grupo chileno ha optado por observar de cerca la evolución del contexto político y regulatorio en Argentina, antes de avanzar con una decisión definitiva, especialmente bajo la administración del presidente Javier Milei, cuya política minera aún está siendo evaluada por inversionistas extranjeros.
