Mientras América Latina debate entre atraer inversiones o proteger su autonomía, el gigante asiático se consolida como socio estratégico en minería, energía y tecnología.
El nuevo capítulo en la relación América Latina-China
América Latina se prepara para un importante encuentro en el marco del IV Foro Ministerial China–Celac, programado para el 13 de mayo en Beijing. Más de 30 países discutirán el futuro de una relación marcada por inversiones en minería, litio, energía e infraestructura.
China: un socio estratégico en crecimiento
China se ha convertido en el segundo mayor inversor extrarregional en la región latinoamericana, consolidándose como el principal socio comercial de naciones como Brasil, Chile y Perú. Este giro económico ha profundizado la dependencia en productos primarios y ha abierto puertas a inversiones en energía limpia, minería crítica y tecnología digital.
- Brasil destaca con inversiones acumuladas por más de US$ 70.000 millones.
- Argentina mantiene un swap de divisas de US$ 18.570 millones y fuertes inversiones en litio, energía e infraestructura.
- Chile, a pesar de tensiones recientes, sigue siendo el principal proveedor de cobre para China.
- Perú resalta con más de US$ 25.000 millones en exportaciones a China y el desarrollo del megapuerto de Chancay.
- Bolivia apuesta por la industrialización del litio con participación de consorcios chinos.
En Centroamérica y el Caribe, China avanza con inversiones en obras públicas y tratados de libre comercio en negociación. Panamá, con su canal estratégico, sigue siendo un punto clave para las operaciones chinas en la región.
Abriendo el debate sobre autonomía y soberanía
El foro plantea nuevamente el desafío de lograr inversión sin comprometer la autonomía de América Latina y evitar caer en viejos esquemas de dependencia de materias primas. Los expertos cuestionan si la región será un mero receptor de capital o podrá actuar con voz propia en este escenario cambiante.
