El segundo ajuste horario en Chile ya tiene fecha confirmada: será el sábado 6 de septiembre de 2025, a las 23:59 horas, momento en que los relojes deberán adelantarse en una hora para dar paso al horario de verano. La medida, vigente desde 1964, busca optimizar el uso de luz natural durante los meses con más horas de sol.
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Este cambio de hora se aplica en 14 regiones del país, mientras que Magallanes y Aysén quedarán exentas, manteniendo su horario habitual durante todo el año.
¿Cuándo y cómo se realiza el cambio de hora en septiembre 2025?
El ajuste oficial será durante la noche del sábado 6 de septiembre, exactamente a las 23:59 horas. En ese instante, los relojes deberán adelantarse 60 minutos, pasando directamente a marcar 01:00 horas del domingo 7 de septiembre.
Este cambio implica una noche más corta y el inicio del horario de verano, el cual se mantendrá hasta el primer semestre de 2026, conforme a las fechas que establecerá posteriormente el Ministerio del Interior.
En territorios insulares:
- En Rapa Nui e Islas Salas y Gómez, el cambio se hará a las 22:00 horas del sábado 6, adelantando una hora hasta las 23:00 horas del mismo día.
¿A qué regiones se aplica el cambio de hora?
El horario de verano se aplicará en las siguientes 14 regiones continentales de Chile:
- Arica y Parinacota
- Tarapacá
- Antofagasta
- Atacama
- Coquimbo
- Valparaíso
- Metropolitana de Santiago
- O’Higgins
- Maule
- Ñuble
- Biobío
- La Araucanía
- Los Ríos
- Los Lagos
Excepciones:
- Región de Magallanes y la Antártica Chilena, y
- Región de Aysén,
no realizarán el cambio de hora, debido a sus particulares condiciones geográficas y de luminosidad.
¿Por qué sigue vigente el cambio de hora?
Pese a años de debate sobre su efectividad, el sistema de horario de verano e invierno sigue en aplicación desde 1964. Entre los argumentos a favor se encuentra el ahorro energético y el mejor aprovechamiento de la luz natural durante las tardes.
Sin embargo, críticas sobre su impacto en la salud, los ciclos de sueño y el rendimiento escolar y laboral han llevado a un debate recurrente sobre la conveniencia de mantener o eliminar el sistema.
El calendario actual es definido anualmente por el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, mediante un decreto supremo, el cual fija las fechas de cambio y mantiene la política como parte de la normativa vigente.
