La Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) ordenó a CGE suspender de inmediato la facturación de consumos eléctricos en las regiones de O’Higgins y Maule. La medida responde a numerosas irregularidades detectadas en la lectura de medidores, que han afectado a más de 141 000 clientes. La suspensión permanecerá vigente mientras se revisa cuidadosamente la información entregada por la distribuidora.
Relacionados:
¿Qué desencadenó la crisis?
El origen del problema está en la terminación del contrato con la empresa encargada de las lecturas, ocurrida el 3 de julio por incumplimientos laborales y problemas financieros. Eso provocó retrasos en la toma de lectura y el reparto de boletas, generando una acumulación masiva de reclamos por cobros irregulares.
Medidas exigidas a CGE
La SEC solicitó a la distribuidora que remita, en un plazo de tres días hábiles, un listado detallado con los clientes afectados, indicando número de usuario y ruta de lectura. Además, durante el proceso de revisión, CGE no podrá suspender el suministro eléctrico de usuarios que estén en etapa de reclamo.
Una advertencia clara desde la autoridad
Marta Cabeza, superintendenta de la SEC, subrayó que el compromiso de la entidad es proteger a la ciudadanía y garantizar un cobro justo y transparente. También advirtió que cualquier irregularidad detectada puede derivar en procesos administrativos y multas, con el objetivo de resguardar los derechos de los usuarios.
