Una respuesta tras el apagón nacional
A más de seis meses del apagón masivo que afectó a gran parte del país, el Ministerio de Energía informó el inicio de una cooperación estratégica con la Agencia Internacional de Energía (AIE). El objetivo es reforzar la seguridad del sistema eléctrico chileno, incorporando estándares internacionales y experiencias comparadas que permitan entregar mayor confianza a la ciudadanía en la continuidad del suministro.
Incorporación de buenas prácticas internacionales
Según la cartera que dirige Diego Pardow, el acuerdo permitirá al país acceder a lineamientos técnicos de referencia mundial, además de revisar experiencias previas de restauración de suministro e investigación de apagones en otros países.
Uno de los focos será el análisis de los marcos legales y regulatorios que rigen las investigaciones independientes en caso de fallas graves, garantizando que se realicen con criterios de transparencia, rigor técnico y autonomía frente a intereses externos.
Fortalecimiento institucional y protocolos de emergencia
La cooperación también contempla un trabajo conjunto en procesos de reporte y coordinación interinstitucional durante emergencias eléctricas. En particular, se busca optimizar la interacción entre gobiernos, reguladores y operadores de sistemas eléctricos, de modo de contar con protocolos nacionales más robustos y eficaces frente a contingencias.
“Esta cooperación representa un punto de partida para fortalecer nuestro sistema eléctrico y ampliar sus capacidades de prevención y respuesta”, destacó el ministro Pardow, tras participar en la Electricity Security Task Force de la AIE, instancia que reúne a representantes de la Unión Europea, Japón y Australia.
Proyección para el sistema eléctrico chileno
El Ministerio de Energía sostuvo que esta alianza con la AIE contribuirá no solo a mejorar la resiliencia del sistema eléctrico, sino también a generar un marco de confianza para futuros inversionistas y consumidores, en un contexto de mayor electrificación y transición hacia energías limpias.
Con ello, Chile se suma a una red internacional de cooperación técnica que busca elevar los estándares de seguridad y aprendizaje en torno a uno de los temas más críticos para el desarrollo económico y social: el suministro confiable y seguro de electricidad.
