Flexen construirá un sistema de 333 MW para reforzar la red eléctrica nacional y optimizar el uso de energía solar.
El proyecto de almacenamiento energético Buin, aprobado por la Coeva Metropolitana con una inversión de US$225 millones, contempla una potencia de 333 MW y se perfila como una pieza estratégica para la integración de energías renovables en la Región Metropolitana
La Región Metropolitana sumará una nueva infraestructura clave para la transición energética. La Comisión de Evaluación Ambiental (Coeva) aprobó por unanimidad el proyecto de almacenamiento energético y línea de transmisión “Buin”, impulsado por la compañía Flexen, con una inversión estimada de US$225 millones.
La iniciativa contempla la instalación de un sistema de almacenamiento de 333 megawatts (MW) de potencia total y hasta 1.480 megawatts-hora (MWh) de capacidad, además de la construcción de una línea de transmisión de 380 metros para su conexión con la subestación Maipo del Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Un paso clave en la transición energética
El proyecto, presentado al Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) en diciembre de 2024, busca almacenar la energía generada durante las horas de mayor radiación solar —principalmente proveniente de centrales fotovoltaicas— y liberarla al sistema en los períodos de alta demanda, especialmente en la tarde y la noche.
Con esta tecnología, Flexen apunta a contribuir al equilibrio del sistema eléctrico, optimizando la utilización de la energía renovable y reduciendo la necesidad de generación térmica. Según la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), la planta operará mediante equipos modulares de baterías, inversores y centros de transformación, dispuestos en un terreno de aproximadamente 6 hectáreas ubicado en un camino rural de la ruta G-45, en la comuna de Buin.
El periodo de construcción se extenderá por cerca de 12 meses, mientras que la operación del sistema está proyectada para 25 años, con mantenimiento continuo y monitoreo remoto de las unidades de almacenamiento.
Una tendencia en expansión
El proyecto de Flexen se suma a la creciente cartera de sistemas de almacenamiento energético que están siendo aprobados en distintas regiones del país, reflejando la acelerada transformación de la matriz energética chilena.
De acuerdo con cifras del Ministerio de Energía, Chile superará los 2.000 MW de capacidad instalada en sistemas de almacenamiento hacia 2026, impulsado por la incorporación de tecnologías de baterías de ion-litio y proyectos híbridos que combinan generación solar con almacenamiento.
En esa línea, el sistema Buin se posiciona como uno de los mayores desarrollos de su tipo en la Región Metropolitana, y un componente estratégico para el manejo de excedentes fotovoltaicos que actualmente se generan en el norte del país y que saturan la red durante las horas de baja demanda.
Reforzamiento de la red nacional
La interconexión eléctrica constituye otro elemento esencial del proyecto. Flexen construirá una subestación elevadora que permitirá adaptar el nivel de tensión del sistema de almacenamiento al del SEN, facilitando su integración con la subestación Maipo, ubicada a menos de medio kilómetro del emplazamiento.
El diseño de la línea de transmisión contempla infraestructura soterrada en parte del trazado, lo que reducirá el impacto visual y medioambiental. Asimismo, la empresa comprometió la aplicación de medidas de control de ruido y polvo durante la etapa de obras, junto con la implementación de planes de manejo de residuos y revegetación del terreno.
Evaluación ambiental y aprobación unánime
La Coeva Metropolitana valoró el aporte del proyecto a la descarbonización de la matriz energética y al cumplimiento de los compromisos de neutralidad de carbono al 2050 asumidos por Chile. Según el acta de la sesión, la aprobación se dio por unanimidad, tras constatar el cumplimiento de los requisitos técnicos y ambientales establecidos por el SEIA.
El proyecto Buin de Flexen fue calificado favorablemente mediante la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), lo que permitirá iniciar sus obras una vez completados los trámites administrativos y permisos sectoriales correspondientes.
Impulso a la industria del almacenamiento
El desarrollo de iniciativas como la de Flexen evidencia el creciente interés privado por invertir en tecnologías de almacenamiento, consideradas esenciales para la flexibilidad del sistema eléctrico y la seguridad energética del país.
Expertos del sector coinciden en que la expansión de este tipo de proyectos marcará una nueva etapa en la operación del sistema nacional, ya que permitirá almacenar excedentes renovables que hoy se desperdician o se inyectan con baja rentabilidad debido a la congestión en las líneas de transmisión.
En esa línea, la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento (ACERA) ha señalado que el desarrollo de proyectos de baterías será determinante para mantener la estabilidad del sistema y reducir la dependencia de combustibles fósiles en los momentos de mayor demanda.
Proyección y relevancia
Con la aprobación ambiental de Buin, Flexen consolida su posición dentro del mercado nacional de almacenamiento energético, que proyecta un crecimiento exponencial durante la próxima década. La empresa estima iniciar las obras durante el primer trimestre de 2026, una vez obtenidos los permisos de construcción y conexión definitiva al SEN.
De concretarse según lo planificado, el sistema podría comenzar a operar a mediados de 2027, reforzando la infraestructura eléctrica de la zona central y contribuyendo a mejorar la eficiencia y estabilidad del suministro nacional.
