Panorama “cautelosamente optimista” para el sector minero
Un escenario de precios moderadamente al alza y una carrera global por asegurar minerales estratégicos definirán el mercado minero en 2026, de acuerdo con el último informe de BMI, unidad de Fitch Solutions. El estudio anticipa que la necesidad de avanzar en descarbonización, la oferta más ajustada y la competencia geopolítica por recursos clave contrarrestarán la persistente debilidad del sector inmobiliario en China continental, elemento que sigue presionando a los metales base.
En este contexto, BMI sostiene que “la política industrial será la principal herramienta para asegurar minerales críticos en 2026”.
Demanda energética y presiones de oferta
El organismo proyecta un avance ligero en los precios de la mayoría de los minerales y metales, impulsado por la mayor demanda desde sectores vinculados a metas de emisiones netas cero. De acuerdo con su análisis, la incertidumbre relacionada a aranceles tenderá a disminuir en el corto plazo, lo que otorgará un respiro a los productores.
Para el oro, BMI prevé que el promedio de precios en 2026 será mayor al de 2025, aunque con una trayectoria de moderación hacia finales del próximo año. La razón principal: la ralentización del ciclo de flexibilización monetaria global y la eventual detención de los recortes de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
China refuerza su estrategia para dominar minerales críticos
A pesar de la caída inmobiliaria, China volverá a tener un rol central en las cadenas globales de valor. BMI afirma que Pekín acelerará la exploración, aumentará la capacidad en minerales para baterías y tierras raras, y promoverá procesos productivos más limpios. Además, se espera una profundización de sus alianzas con economías ricas en recursos, en un marco de inversión externa más estructurado y con mayores controles.
Los recientes aranceles y restricciones a la exportación de tierras raras confirman que la política proteccionista seguirá siendo una herramienta clave en esta estrategia de influencia global.
Auge de fusiones y adquisiciones orientadas a la transición energética
La competencia por insumos críticos para la transición energética sostendrá la actividad de fusiones y adquisiciones durante 2026. Las empresas mineras y metalúrgicas priorizarán operaciones que amplíen su presencia en cobre, litio y elementos de tierras raras. Aunque los grandes proyectos de capital se mantendrán en agenda, se observa un creciente interés por desarrollos en fases y por ampliaciones brownfield, en un intento por administrar costos y adaptarse a un panorama regulatorio incierto.
BMI también proyecta que la inversión en mercados fronterizos continuará fluyendo a pesar del avance del nacionalismo de recursos. En África, particularmente, gobiernos y comunidades han incrementado su poder de negociación, limitando el margen de las compañías para oponerse a nuevos marcos de participación estatal.
Alianzas estratégicas y reconfiguración del mercado
La creciente presión sobre las cadenas de suministro de sectores como inteligencia artificial, robótica y defensa llevará a que fabricantes tecnológicos y automotrices profundicen sus alianzas con proyectos mineros. Para BMI, el año 2026 estará menos marcado por un boom de precios y más por la disputa estratégica por asegurar volúmenes en origen, en un mercado donde el posicionamiento geopolítico será decisivo.