Donald Trump eligió la noche del miércoles (hora de Washington) un formato poco frecuente —un discurso televisado a la nación— para defender su gestión económica, responsabilizar a Joe Biden por el costo de la vida y proyectar un “auge” para 2026. La escena, el tono y el contenido fueron descritos en detalle por la crónica de El País titulada “Trump exagera los logros de su primer año y culpa a Biden de la marcha de la economía”, mientras que Reuters subrayó el trasfondo político de la intervención —baja aprobación en economía y promesas para recuperar iniciativa— en su cobertura sobre el “rare evening address from the White House”.
Para Chile, el punto no es solo lo que se dijo, sino cómo esas señales reordenan expectativas sobre tasas, dólar, comercio y energía. Y, por esa vía, impactan precios de metales, costos operacionales y decisiones de inversión.
Qué dijo Trump y qué está tratando de instalar en el mercado
En su balance, Trump insistió en que “heredó un desastre”, defendió que la inflación estaría contenida y que los salarios subirían mientras los precios bajan, además de reforzar sus ejes tradicionales (frontera, seguridad, “orden”). El País recogió esa puesta en escena como un intento por imponer el relato pese al malestar por el costo de la vida y señales de enfriamiento económico, en la ya citada crónica de Iker Seisdedos.

Reuters, en tanto, destacó anuncios de corte político y económico: el más llamativo fue la propuesta de un “warrior dividend” de US$1.776 para miembros del servicio, junto con un discurso orientado a mostrar victorias en un contexto de debilidad en aprobación económica, según su reporte sobre el mensaje en horario estelar.
El subtexto que sí mira el mercado es otro: la misma nota de Reuters apunta a que Trump volvió a sugerir que buscará una conducción monetaria más “dovish”, al señalar que nombrará a una autoridad dispuesta a bajar tasas. Esa discusión se cruza con señales internas de la Fed: el gobernador Christopher Waller dijo que la política monetaria sigue en territorio restrictivo y que hay espacio para recortes, de acuerdo con Reuters.
La realidad macro que condiciona a los metales: empleo, inflación y tasas
En minería, el “discurso” importa menos que la trayectoria de tasas y el dólar.
En empleo, el termómetro oficial más reciente disponible muestra una tasa de desempleo de 4,6% en noviembre y un mercado laboral que se ha ido enfriando en comparación anual, según el Employment Situation del BLS: “The Employment Situation — November 2025”.

En inflación, 2025 ha estado marcado además por un factor extraordinario: el cierre parcial del gobierno federal afectó la recolección y publicación de estadísticas, con vacíos relevantes en series de inflación y empleo. Reuters explicó el impacto del shutdown y las brechas que dejó en los reportes en su nota sobre “delayed U.S. employment, CPI reports… with many gaps”. Como referencia “dura” previa a esas disrupciones, el BLS reportó que el CPI “all items” subía 3,0% interanual al cierre de septiembre, en el Consumer Price Index Summary (Septiembre 2025).
En política monetaria, lo más relevante hoy es que la Reserva Federal redujo la tasa en su decisión de diciembre, y dejó trazadas las preocupaciones (incertidumbre elevada, balance de riesgos) en su FOMC statement del 10 de diciembre de 2025.
Cómo puede incidir este cuadro en la minería chilena
1) Cobre: un mercado fuerte, pero más sensible al shock macro
Chile llega a este cierre de año con un cobre en niveles históricamente altos. COCHILCO informó que el metal cerró en US$5,36 por libra en la semana del 8 al 12 de diciembre y describió los factores de mercado (incluidos inventarios y flujos), en su Informe del Mercado Internacional del Cobre.

En ese contexto, un giro en EE.UU. puede pegar por dos vías:
- Tasas y dólar: si el mercado descuenta recortes más rápidos, suele aliviarse el dólar y mejora el “tono” de commodities. Si, por el contrario, la inflación se resiste o se reavivan presiones (por ejemplo, por tarifas), el dólar puede fortalecerse y aumentar la volatilidad de metales.
- Crecimiento y riesgo: cuando sube la incertidumbre política/económica, el precio puede moverse menos por consumo físico y más por “sentiment” y posicionamiento financiero.
2) Costos operacionales: energía, fletes y tipo de cambio
Para la minería chilena, el impacto del dólar es doble: ayuda a ingresos en pesos, pero encarece equipos, repuestos, reactivos, contratos y servicios con componentes dolarizados. A la vez, cualquier escalada geopolítica o cambio brusco en el tablero internacional tiende a reflejarse en petróleo, fletes y seguros, presionando costos antes que producción.
El País mencionó que hubo expectativa (finalmente no concretada) por anuncios de alto voltaje en política exterior, en el mismo contexto del discurso televisado. En minería, ese “ruido” importa porque se traduce rápido en costos.
3) Inversión minera: tasas globales y apetito por riesgo definen el ritmo del CAPEX
Chile no está mirando 2026 con una cartera menor. COCHILCO elevó la proyección de inversión minera a 10 años a US$104.549 millones, el mayor nivel en más de una década, en su publicación “Cartera de inversiones mineras proyectadas…”. Reuters también recogió el ajuste y su magnitud en la nota sobre cómo Chile elevó la previsión de inversión minera hacia 2034 a cerca de US$105.000 millones: “Chile raises mining investment forecast…”.
Con esa cartera sobre la mesa, la pregunta práctica para 2026 es: ¿se abren ventanas de financiamiento más baratas y estables, o se impone un escenario de volatilidad (tasas, dólar, primas de riesgo) que retrase decisiones? El discurso de Trump, por sí solo, no decide eso; pero puede acelerar expectativas y, con ello, el costo del capital.
Qué variables conviene monitorear desde Chile
- La evolución de tasas y comunicación de la Fed, partiendo por el comunicado oficial del FOMC.
- Los próximos datos “duros” del mercado laboral, con base en el Employment Situation del BLS.
- La lectura de inflación disponible y el efecto de las disrupciones estadísticas explicadas por Reuters en la nota sobre reportes atrasados y con brechas.
- El pulso semanal del cobre y su microestructura (inventarios, primas, narrativa), siguiendo el informe semanal de COCHILCO.
El discurso de Trump busca consolidar un relato de “normalización” y boom, pero el impacto real sobre la minería chilena se jugará en el tablero que mueven los mercados: tasas, dólar, comercio y energía. Con un cobre alto y una cartera de inversión minera récord en Chile, 2026 puede ser un año de oportunidades si se estabilizan condiciones financieras; o un año de ajustes si domina la volatilidad. En ambos casos, la ventaja competitiva estará en gestión de riesgo, disciplina de costos y lectura temprana de señales macro.

