La Región de Antofagasta concentra la mayor cartera de proyectos mineros del país, impulsada por el cobre y el litio.
La Región de Antofagasta volvió a posicionarse como el principal polo de desarrollo minero del país, luego de que la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) presentara su más reciente catastro de inversiones para el período 2025–2034. El informe, difundido esta semana, cifra la cartera nacional de proyectos mineros en US$104.549 millones, el monto más alto registrado en los últimos 11 años, con Antofagasta liderando ampliamente a nivel regional.
De acuerdo con el reporte, la región concentra inversiones por US$40.734 millones, equivalentes a cerca del 39% del total nacional. Este resultado reafirma el rol estratégico del territorio en la minería chilena, particularmente en proyectos asociados al cobre y al litio, minerales clave para la transición energética global y la demanda tecnológica de largo plazo.
Un escenario histórico de inversión
El seremi de Economía de Antofagasta, Matías Muñoz Valdebenito, valoró el nuevo catastro elaborado por Cochilco, señalando que confirma un escenario económico particularmente favorable al cierre del año. Según explicó, el dinamismo de la cartera refleja no solo condiciones de mercado, sino también un trabajo institucional orientado a entregar mayores certezas a la inversión.
“Los números que nos entrega Cochilco confirman que el país y, sobre todo, la región de Antofagasta están cruzando un escenario histórico de desarrollo de la industria minera, mayormente empujado por el cobre, pero también por el litio, ambos motores clave para el desarrollo futuro”, sostuvo la autoridad regional.
Marco regulatorio y certezas para el sector
Muñoz destacó además el rol de iniciativas impulsadas por el Ejecutivo para destrabar proyectos y acelerar su materialización. Entre ellas mencionó la Ley de Autorizaciones Sectoriales —conocida como ley de permisos—, que busca reducir los tiempos de tramitación sin rebajar estándares ambientales, y el Royalty Minero, orientado a generar mayores recursos para las regiones productoras.
A juicio del seremi, estas herramientas “vienen a brindar mayores certezas que posicionen a Chile como un lugar seguro para el desarrollo de proyectos del sector minero y otros sectores productivos”, en un contexto internacional altamente competitivo por la atracción de capitales.
Impacto económico regional
El informe de Cochilco se suma a otros indicadores positivos para la región. El seremi recordó que, según cifras recientes del Banco Central, las exportaciones mineras de Antofagasta alcanzaron los US$5.162 millones, con un crecimiento interanual de 12,6%, explicado en gran parte por el desempeño del cobre.
Asimismo, destacó la evolución del mercado laboral regional. En su última medición, la tasa de desocupación de Antofagasta se ubicó en 7,4%, por debajo del promedio nacional, lo que refuerza la incidencia de la actividad minera en el empleo y la economía local.
Desafíos hacia adelante
Pese al positivo escenario, la autoridad advirtió que el desafío futuro será sostener este ciclo de inversión con estabilidad regulatoria, resguardo ambiental y desarrollo territorial equilibrado. “El desafío que se viene es seguir generando estabilidad como base para la inversión, promoviendo condiciones regulatorias claras, la protección del medio ambiente y el desarrollo de los territorios que aportan a Chile”, concluyó Muñoz.
Fuente: El América

