Los precios de los combustibles en Chile experimentaron una notable caída, proporcionando un alivio económico para los consumidores de cara al cierre del año.
Disminución significativa en el precio de los combustibles
La Empresa Nacional del Petróleo (Enap) publicó su Informe Semanal de Precios para Combustibles, informando una baja en los valores de diversos hidrocarburos. Según el detallado informe, a partir de este jueves, los precios experimentarán reducciones importantes, siendo uno de los descensos más significativos en meses recientes. La bencina de 93 y 97 octanos disminuyó su precio en $26,5 por litro, mientras que el kerosene (parafina) registró un descenso mayor de $41,1 por litro. Por su parte, el diésel bajó $21,4 por litro, y el gas licuado de petróleo (GLP) vehicular documentó una reducción más moderada de $7,3 por litro.
Enap destacó en su declaración que no influye directamente en los precios finales para los consumidores, afirmando que «Enap no fija ni regula los precios de los combustibles en el mercado chileno». Asimismo, el organismo explicó que su rol principal es comercializar derivados de hidrocarburos con las empresas distribuidoras, las cuales determinan autónomamente el precio de venta al público. Este mecanismo responde al carácter abierto y competitivo del mercado chileno de combustibles.
- Bencina de 93 octanos: -$26,5 por litro.
- Bencina de 97 octanos: -$26,5 por litro.
- Kerosene (parafina): -$41,1 por litro.
- Diésel: -$21,4 por litro.
- GLP vehicular: -$7,3 por litro.
Próximo ajuste en el precio de combustibles
De acuerdo con el calendario habitual de modificación de precios, los valores actuales regirán hasta el próximo ajuste programado. Esto significa que el precio de los combustibles será revisado nuevamente el jueves 1 de enero de 2026. Esta política de revisión responde a un ciclo de tres semanas que permite a los consumidores planificar sus gastos y evaluar el impacto de estas fluctuaciones en sus finanzas.
El descenso de precios anunciado por Enap representa una buena noticia para los sectores que dependen de combustibles fósiles, como el transporte y la distribución logística, generando un efecto positivo en el costo operativo de diversas industrias. Con una baja en los combustibles, se espera también un eventual alivio en productos y servicios que se ven afectados por las tarifas de transporte.
