En la antesala de las elecciones presidenciales, ACERA y el Colegio de Ingenieros realizaron el último debate especializado en energía, convocando a cerca de 600 asistentes presenciales y remotos. La instancia reunió a los representantes programáticos de Jeannette Jara y José Antonio Kast —Nicolás Böhme y José Venegas, respectivamente— para contrastar sus visiones sobre el futuro del sistema energético chileno. El sector enfrenta “nuevos desafíos de estabilidad, resiliencia y flexibilidad”, según ACERA.
Un sistema mayoritariamente renovable que exige nuevas capacidades
La apertura del encuentro estuvo a cargo de Ana Lía Rojas, directora ejecutiva de ACERA, quien destacó que Chile ya opera con una matriz mayoritariamente renovable —41% ERNC y 21,3% hidroelectricidad a octubre de 2025—, aunque con señales de alerta. El apagón del 25F, el aumento coyuntural de la generación a carbón, el estancamiento de la demanda y las tensiones tarifarias han evidenciado la necesidad de una operación más robusta y preparada para mayor variabilidad.
Rojas subrayó que el avance renovable requiere fortalecer atributos sistémicos, particularmente en tecnologías basadas en inversores, digitalización de redes y recursos flexibles que permitan sostener la seguridad de suministro en un sistema con menor respaldo térmico.
Cuatro prioridades estratégicas para el próximo gobierno
ACERA presentó un diagnóstico técnico que derivó en cuatro mensajes clave para orientar la política energética:
- Estabilidad y resiliencia sistémica:
El sistema necesita mejorar el control de frecuencia sin inercia mecánica, la regulación de tensión y la coordinación entre generación variable, almacenamiento y demanda flexible. - Almacenamiento como infraestructura crítica:
Con 1,4 GW en operación y un pipeline superior a 6,5 GW, el desafío ya no es solo instalar baterías, sino integrarlas como operadores de estabilidad, aportando servicios grid-forming y desplazando generación térmica para “descarbonizar la noche”. - Transmisión como principal cuello de botella:
Persisten congestiones estructurales que obligan a duplicar la capacidad hacia 2040, acelerar proyectos HVDC y utilizar tecnologías avanzadas de gestión de flujos para reducir curtailments. - Demanda eléctrica estancada:
Con un crecimiento cercano a 0%, ACERA llamó a impulsar electrificación profunda y activar la demanda flexible para reducir vertimientos y aprovechar mejor la infraestructura existente.
Propuestas de los comandos: seguridad, tarifas y expansión de redes
Tras la presentación técnica, los representantes de Jara y Kast debatieron sobre:
- El vínculo entre crecimiento económico y expansión energética.
- Seguridad de suministro con alta penetración renovable.
- La urgencia de una transmisión robusta y oportuna.
- Tarifas eléctricas y señales de inversión.
- El rol del almacenamiento en mercados eléctricos.
- Modernización institucional y regulatoria.
La conversación, moderada por Julio Lira, presidente de la Comisión de Energía del Colegio de Ingenieros, permitió observar coincidencias en torno a la descarbonización y al impulso a las renovables, aunque con diferencias respecto del ritmo, la priorización de inversiones y el diseño de mecanismos regulatorios.
Un aporte técnico al debate público
Con un formato híbrido y una alta participación, el encuentro consolidó el rol de ACERA como articuladora del diálogo sectorial, ofreciendo insumos para que la próxima administración combine seguridad de suministro, inversión renovable y estabilidad regulatoria.

