La iniciativa busca reforzar el acceso estadounidense a cobre y cobalto, reducir la dependencia de China y consolidar un nuevo corredor ferroviario hacia el Atlántico.
Una apuesta estratégica por recursos clave
Estados Unidos ha iniciado conversaciones formales para proporcionar más de US$1.000 millones destinados a fortalecer la cadena de suministro de minerales críticos en África central, con foco en la República Democrática del Congo (RDC). La Corporación Financiera de Desarrollo Internacional (DFC, por su sigla en inglés) prevé apoyar dos iniciativas estratégicas: una nueva empresa conjunta de cobre y cobalto entre la estatal congoleña Gecamines y la suiza Mercuria Energy Trading, y un proyecto ferroviario destinado a conectar a la región con la costa atlántica de Angola.
La inversión busca asegurar cadenas de suministro vitales y reducir la dependencia de Estados Unidos del dominio chino en minerales críticos.
Washington intensifica su ofensiva por minerales críticos
El presidente Donald Trump ha priorizado consolidar el acceso seguro a minerales esenciales para tecnologías militares, energías limpias y la industria electrónica. China domina actualmente gran parte de la minería y procesamiento global de cobre, cobalto, litio y manganeso, y Washington considera indispensable diversificar proveedores.
La firma de una asociación estratégica en infraestructura y minerales entre la RDC y EE.UU., concretada el jueves, refuerza esta política. El Congo es uno de los territorios más ricos del mundo en minerales críticos, y su producción de cobre y cobalto es fundamental para la fabricación de baterías, vehículos eléctricos y sistemas de defensa.
Un nuevo corredor logístico hacia el Atlántico
Como parte del acuerdo, el Congo se ha comprometido a redirigir crecientes volúmenes de sus exportaciones hacia el corredor ferroviario de Lobito, en Angola, alejándose de rutas tradicionales hacia el sur y el este. Este giro logístico apunta a reducir cuellos de botella, ampliar la capacidad comercial y acercar minerales clave a puertos más alineados con los intereses occidentales.
En este marco, la DFC evalúa otorgar hasta US$1.000 millones a la portuguesa Mota Engil para la rehabilitación, operación y transferencia de la línea férrea Dilolo–Sakania, vital para conectar las minas congoleñas con el corredor de Lobito.
Acceso preferente para industrias estadounidenses
El acuerdo entre Mercuria y Gecamines, anunciado el viernes, prevé una asociación para el comercio de cobre y cobalto que otorgaría a empresas estadounidenses un derecho preferente de acceso a estos insumos estratégicos. Según Gecamines, la participación de la DFC permitiría garantizar a los compradores de EE.UU. una vía estable para asegurar metales esenciales para su competitividad económica.
Un movimiento con impacto regional
La magnitud del financiamiento y la naturaleza de los proyectos reflejan un esfuerzo más amplio de Estados Unidos por ganar influencia en África central mediante inversiones en infraestructura y minería. Al mismo tiempo, la iniciativa podría ofrecer beneficios económicos significativos a la región, siempre que se garantice la gobernanza, transparencia y estabilidad en las operaciones.