Gobierno afirmó que tomó la decisión para proteger el turismo, flora, fauna y derechos de pueblos originarios.
El gobierno estadounidense prohibió la actividad minera durante los próximos 20 años en una región del estado de Minnesota (centro-norte) en donde una subsidiaria de la minera chilena Antofagasta PLC quería revivir un proyecto minero de cobre y níquel que opositores temen que contamine una importante vía fluvial recreativa.
Por su parte, Twin Metals, la subsidiaria de Antofagasta responsable del proyecto minero, se declaró “profundamente decepcionada y asombrada” por la decisión, y sostuvo que sigue comprometida con hacer valer sus “derechos”.
En un comunicado de prensa emitido el jueves, el departamento del Interior de EE.UU anunció que la moratoria a 20 años cubre sobre 91.000 hectáreas del Bosque Nacional Lago Superior, en el límite entre EE.UU. y Canadá.
Dentro de ese bosque se encuentra la reserva Boundary Waters Canoe Area Wilderness (BWCAW) y su cuenca hidrográfica, “una espectacular red de ríos, lagos y bosques en el noreste de Minnesota que constituye la zona natural más visitada de Estados Unidos”, indicó el departamento del Interior .
“He tomado esta decisión basándome en los mejores datos científicos disponibles y en una amplia información pública, con la vista puesta en la protección de este lugar tan especial para las generaciones futuras“, afirmó, por su parte, la secretaria de Interior, Deb Haaland.
El Departamento explicó que la decisión se toma tras más de un año de estudios de impacto ambiental, reuniones con la comunidad y tribus de pueblos originarios de la zona, y una consulta pública en la que se recibieron más de 225.000 comentarios.
Haaland agregó que la agencia federal que dirige “se toma muy en serio su obligación de administrar las tierras y aguas públicas en nombre de todos los estadounidenses. Proteger un lugar como Boundary Waters es fundamental para preservar la salud de la cuenca y la fauna que la rodea, cumplir con nuestras responsabilidades tribales en virtud de los tratados e impulsar la economía recreativa local”.
La prohibición busca proteger “de los posibles efectos adversos de las nuevas prospecciones y explotaciones mineras y geotérmicas” a la cuenca hidrográfica del río Rainy, incluida la zona silvestre del BWCAW, y a territorio cedido en 1854 a bandas Chippewa de pueblos originarios
“Más de 150.000 visitantes de todo el mundo acuden cada año a los 1,1 millones de acres (445.000 hectáreas) de Boundary Waters, el único espacio natural lacustre del Sistema Nacional de Conservación de Espacios Naturales”, explicó la agencia gubernamental. La reserva cuenta “con más de 1.200 millas (1.900 km) de rutas en canoa, 12 rutas de senderismo y 2.000 campings designados, y contribuye con hasta US$ 17,4 millones anuales a los más de US$ 540 millones provenientes de las economías recreativas y turísticas de los condados de Cook, Lake y St. Louis”.
Los antecedentes del conflicto entre EE.UU. y la minera
El proyecto de Twin Metals fue paralizado en enero del pasado por la administración Biden y luego la minera demandó al gobierno estadounidense en un tribunal federal en Washington DC, alegando que la cancelación fue “arbitraria y caprichosa” y que la minera tiene derecho a demostrar que su proyecto puede cumplir con los estándares ambientales.
Twin Metals solicitó al tribunal que restablezca los contratos de arrendamiento para el proyecto, que se otorgaron por primera vez en 1966 y se han pasado entre compañías sucesoras sin haberse realizado actividades mineras en el sitio.
La mina subterránea que propone Twin Metals sería una importante fuente de cobre y níquel —dos metales cruciales para la transición hacia la energía verde— en EE.UU., pues la única mina existente en el país cerrará en 2025.
Twin Metals sostiene que la nueva Ley de Reducción de la Inflación de EE.UU., que vincula créditos fiscales para la adquisición de autos eléctricos a minerales producidos en el país o en países aliados, demuestra que su mina debe construirse.
Tras conocer la decisión del departamento del Interior, Twin Metals dijo en un comunicado que está “profundamente decepcionada y asombrada por el hecho de que el gobierno federal haya decidido promulgar una moratoria de 20 años” en la zona y reiteró que en la región hay algunos de los mayores yacimientos mundiales de minerales “vitales” para la transición a energías limpias, cuya explotación implica una conlleva una importante fuente de empleos y es necesaria para la seguridad nacional y la cadena de suministros en el país.
“Creemos que nuestro proyecto desempeña un papel fundamental en la consecución de todas estas prioridades y mantenemos nuestro compromiso de hacer valer los derechos de Twin Metals”, concluyó la minera.
Fuente: forbes