El oro cayó más en casi un mes después de que los datos de inflación de EE. UU. llegaran más calientes de lo esperado, manteniendo la presión sobre la Reserva Federal para que siga aumentando agresivamente las tasas.
El índice de precios al consumidor subió un 0,1% en agosto respecto al mes anterior, sorprendiendo al mercado después de que el pronóstico medio de los economistas apuntara a una pequeña caída. Los rendimientos del dólar y del Tesoro aumentaron tras el informe, lo que provocó que el oro cayera hasta un 1,6%, la mayor caída desde el 15 de agosto.
El informe del IPC mantendrá a la Fed en una línea agresiva antes de su reunión la próxima semana. Los funcionarios indicaban que era probable otro ajuste de 75 puntos básicos a pesar de que la inflación se moderó a principios del verano, y el mercado de swaps ahora está valorando por completo el aumento de gran tamaño.
“Un informe de inflación sorprendentemente caliente sacó el tapete para el oro, ya que los inversores ahora están comenzando a valorar un mayor ajuste de la Reserva Federal. Un aumento de la tasa de 75 puntos básicos es un trato hecho para septiembre y parece que no veremos un cambio a la baja en noviembre”, dijo Ed Moya, analista senior de mercado de Oanda.
El oro cayó un 1,1% a 1.706,18 dólares la onza a las 9:42 a. m. en Nueva York, tras caer hasta un 1,6% antes. El índice Bloomberg Dollar Spot subió un 0,7% después de caer un 0,4% el lunes. También cayeron la plata al contado, el platino y el paladio.
Fuente: Mining
