Un esfuerzo estratégico para compensar la pérdida de mercados europeos, ampliando suministros esenciales durante el invierno.
Gazprom, la gigante energética rusa, ha anunciado planes para incrementar los suministros de gas a Hungría y China este año. Esta movida parece ser una respuesta estratégica para compensar la pérdida de la mayoría de sus mercados en Europa desde el comienzo de la guerra en Ucrania y las subsiguientes explosiones que dañaron severamente sus gasoductos Nord Stream bajo el mar Báltico.
Aumento en los suministros a Hungría
Alexei Miller, jefe de Gazprom, fue citado por la agencia de noticias TASS, indicando que la empresa suministrará gas adicional a Hungría durante el próximo invierno. Este incremento en los suministros es parte de un esfuerzo continuo para mantener relaciones sólidas y continuas con Hungría, quien ha mantenido lazos amistosos con Rusia, a pesar de las tensiones actuales con la Unión Europea debido a la guerra en Ucrania. Viktor Orban, primer ministro de Hungría, ha mostrado una postura más flexible hacia Rusia, buscando salvar los contactos bilaterales y mantener un flujo constante de energía durante los meses de invierno.
Expansión hacia el mercado chino
Además de incrementar los suministros a Hungría, Gazprom también tiene planes para aumentar los suministros a China en 600 millones de metros cúbicos adicionales este año, por encima de las obligaciones contractuales existentes. Según Miller, la demanda diaria de China ha sido consistentemente más alta que los niveles contratados, y Gazprom ha estado suministrando volúmenes adicionales al mercado chino regularmente desde hace varios años.
Contexto geopolítico
Este incremento en los suministros se produce en un contexto de creciente incertidumbre y tension geopolítica. Desde el inicio de la guerra en Ucrania, Gazprom ha perdido la mayoría de sus mercados en Europa. Además, la decisión de aumentar los suministros a Hungría y China parece ser una estrategia deliberada para diversificar y expandir sus operaciones y reducir la dependencia de los mercados europeos, que han sido históricamente cruciales para la empresa rusa.