Siete proyectos cupríferos de gran envergadura, con inversiones combinadas que superan los US$21.000 millones, se vislumbran como la apuesta más significativa en la frontera entre Chile y Argentina para el inicio de operaciones hacia 2030.
Cooperación minera binacional: Una alianza estratégica en la región
La colaboración entre Chile y Argentina en el sector minero ha dado paso a la materialización de siete proyectos de magnitud, un avance que podría promover el intercambio de bienes, servicios, tecnologías e insumos a lo largo de los más de 6.600 kilómetros de frontera común. Estas iniciativas, que se enmarcan en el tratado de integración minera vigente desde el año 2000, pretenden consolidar un hito en la cooperación entre ambas naciones.
“La estabilidad regulatoria y las decisiones estratégicas serán determinantes para el éxito de estos proyectos”, aseguró Rolando Dávila, coordinador de la comisión binacional de minería de la Cámara Chileno-Argentina de Comercio.
Rolando Dávila
- Infraestructura logística crucial para el desarrollo minero.
- Gestión eficiente de recursos hídricos y energéticos.
- Financiamiento como catalizador de la viabilidad de los proyectos.
Proyectos clave: Avance hacia la producción
Pese a las fluctuaciones políticas recientes en ambos países, varios proyectos destacados podrían iniciar operaciones antes de finales de la década. Josemaría, Filo del Sol, Taca Taca, Los Azules, El Pachón, Mara y San Jorge PSJ se perfilan como los más avanzados, representando inversiones millonarias que impulsarán el sector minero en la región.
Colaboración estratégica y desafíos compartidos
Chile aporta su expertise en la minería de cobre, con tecnologías de vanguardia y enfoque en sostenibilidad. Argentina, por su parte, destaca en la extracción directa de litio y en la provisión de insumos competitivos para la industria minera. Ambos países enfrentan desafíos comunes como la gestión del agua y la transición energética, donde la integración energética binacional muestra avances significativos.
