Un informe de la Agencia Internacional de Energía resalta cómo Corea supera desafíos energéticos sin sacrificar sus compromisos climáticos.
Avance en la política climática de Corea
Corea ha mantenido sus metas climáticas a pesar de la volatilidad en los mercados energéticos globales, de acuerdo con la Revisión de Política Energética de Corea 2025 publicada por la Agencia Internacional de Energía (AIE). Este informe destaca el fortalecimiento de marcos regulatorios clave y la continuidad de la hoja de ruta climática del país.
La Ley de Neutralidad de Carbono, aprobada en 2021, estableció el objetivo legal de alcanzar cero emisiones netas para 2050, junto con una meta intermedia para el año 2030. Desde la implementación de esta ley, Corea ha conseguido combinar el crecimiento económico con una estabilización gradual de sus emisiones, las cuales alcanzaron su máximo en 2018. Pese a este progreso, la AIE identifica como desafío principal el desuso definitivo del carbón, que aún representa más del 25% de la generación eléctrica del país.
Demanda eléctrica y transición energética
El informe prevé un aumento sustancial de la demanda eléctrica en Corea durante la próxima década. Este crecimiento estará impulsado por la electrificación de sectores como transporte, construcción e industria, así como por el auge de los semiconductores y el establecimiento acelerado de centros de datos.
Ante este panorama, la AIE recomienda inversiones en generación con bajas o nulas emisiones, robustecimiento de la infraestructura eléctrica y ajustes para fomentar señales de precios más eficientes en el mercado mayorista. Sin embargo, Corea continúa mostrando el crecimiento más lento de energías renovables entre los países miembros de la AIE, atribuido a limitaciones geográficas y la oposición comunitaria a nuevos proyectos. La introducción de mercados de servicios de almacenamiento energético es vista positivamente, aunque todavía insuficiente.
Rol del hidrógeno y mercado de emisiones
Corea fue pionera en proponer una hoja de ruta del hidrógeno en 2019, enfocado en los sectores de transporte, energía y construcción. Sin embargo, según el informe, el país necesita precisar el rol del hidrógeno en industrias difíciles de descarbonizar, como la manufactura y el transporte pesado, además de establecer normativas claras para el desarrollo de infraestructura.
En cuanto al Sistema de Comercio de Emisiones, que abarca el 80% de las emisiones nacionales, la AIE señala su limitada efectividad debido al bajo precio del carbono y la insuficiente liquidez del mercado. Las recomendaciones incluyen aumentar las subastas y diseñar mecanismos para estabilizar los precios y fortalecer el impacto de esta herramienta.
Reformas institucionales y capacidades industriales
La creación del nuevo Ministerio de Clima, Energía y Medio Ambiente (MCEE) es vista como una oportunidad para mejorar la coordinación sectorial y acelerar la transición hacia energías renovables. Paralelamente, la AIE sugiere establecer un regulador independiente para los mercados de electricidad, gas e hidrógeno, lo que podría aumentar la transparencia y promover precios eficientes.
Adicionalmente, el informe enfatiza las ventajas únicas de Corea, como su industria pesada, semiconductores, tecnología nuclear y baterías avanzadas. Aprovechar estas fortalezas en la transición energética podría consolidar su liderazgo climático y su competitividad a nivel internacional.
