La construcción por parte de Aclara de la primera planta de separación de tierras raras pesadas en Estados Unidos busca establecer un suministro confiable y sostenible de minerales críticos mediante la integración productiva con depósitos de arcilla iónica en Chile y Brasil.
Un paso estratégico hacia la autosuficiencia estadounidense en minerales críticos
La compañía canadiense Aclara Resources Inc. (TSX:ARA) anunció oficialmente la construcción de la primera instalación de separación de tierras raras pesadas (HREE) en Estados Unidos, que se ubicará en el estado de Luisiana. El proyecto tiene como objetivo producir elementos estratégicos como disprosio (Dy), terbio (Tb) y neodimio-praseodimio (NdPr), esenciales para la fabricación de vehículos eléctricos, turbinas eólicas, drones y sistemas robóticos.
Esta instalación permitirá que Estados Unidos reduzca su dependencia del suministro asiático, particularmente de China, al poder abastecer hasta el 75 % de su demanda de disprosio y terbio para 2028, según estimaciones de la empresa. La planta operará con alimentación sostenible proveniente de depósitos de arcilla iónica en Brasil y Chile, asegurando un flujo de materia prima confiable y ambientalmente responsable.
Luisiana, epicentro de una nueva industria tecnológica
Aclara informó que la planta estará emplazada en un terreno de 82 acres en el Puerto de Vinton, con acceso directo a rutas terrestres y fluviales, lo que optimiza la logística del proyecto. El Estado de Luisiana comprometió un paquete de incentivos fiscales y subvenciones por US$ 46,4 millones, en el marco de su política de atracción de inversiones en sectores estratégicos.
Las proyecciones iniciales contemplan una producción anual de 200 toneladas de disprosio, 30 toneladas de terbio y 1.400 toneladas de NdPr, lo que equivale al 14 % de la producción oficial de DyTb de China, consolidando a Estados Unidos como nuevo actor relevante en la cadena global de suministro de tierras raras.
Colaboración técnica y científica internacional
El diseño y la ingeniería de la planta estarán a cargo de Hatch Ltd., mientras que la validación del proceso de separación patentado de Aclara se desarrolla en conjunto con la Universidad Virginia Tech, mediante una planta piloto operativa desde el primer trimestre de 2026. Esta instalación permitirá acumular datos experimentales durante al menos 18 meses antes del inicio formal de operaciones industriales en Luisiana.
De forma paralela, Aclara continúa con el desarrollo de su Proyecto Carina en Brasil, del cual se espera publicar el Estudio de Prefactibilidad (PFS) en noviembre de 2025, seguido de un Estudio de Factibilidad (FS) en el segundo trimestre de 2026. Además, la compañía trabaja en exploraciones en Chile, donde sus depósitos de arcilla iónica complementarán la cadena de suministro que alimentará la planta estadounidense.
Alianza hemisférica para minerales estratégicos
El director ejecutivo de Aclara, Ramón Barua, destacó que la prioridad fue “identificar una ubicación que permitiera un desarrollo rápido, dada la urgente necesidad de establecer un suministro confiable de estos minerales críticos”. Asimismo, subrayó el respaldo institucional del Estado de Luisiana, que ha brindado “un entorno propicio para la inversión en sectores de alta tecnología”.
Por su parte, el director de operaciones, Hugh Broadhurst, señaló que las nuevas instalaciones “se convertirán en un pilar fundamental para la reindustrialización de minerales críticos en el hemisferio occidental”, en tanto que la secretaria del Departamento de Desarrollo Económico de Luisiana (LED), Susan B. Bourgeois, afirmó que “la inversión de Aclara demuestra el valor de contar con infraestructura lista para el desarrollo y con alianzas locales sólidas que atraen a empresas globales de vanguardia”.
Finalmente, el Dr. Aaron Noble, jefe del Departamento de Ingeniería de Minas y Minerales de Virginia Tech, sostuvo que “el liderazgo de Aclara en la extracción y el procesamiento de tierras raras complementa el compromiso académico con el avance tecnológico y la formación de futuros líderes para la minería moderna”.
Un hito para la seguridad energética y tecnológica global
La decisión de Aclara de construir esta planta en Luisiana marca un hito en la reconfiguración del mapa global de tierras raras, impulsando una mayor diversificación geográfica y resiliencia en la cadena de suministro occidental. La integración operativa con los depósitos de arcilla iónica en Chile y Brasil no solo refuerza la autosuficiencia norteamericana, sino que también posiciona a Sudamérica como socio estratégico clave en la economía de minerales críticos.
Con esta iniciativa, Aclara avanza en su meta de consolidar un suministro confiable, sostenible y competitivo de elementos esenciales para la transición energética, contribuyendo al desarrollo tecnológico y a la seguridad económica global desde una perspectiva hemisférica y colaborativa.




