El National Renewable Energy Laboratory (NREL) del Departamento de Energía de EE.UU. ha logrado utilizar la asistencia robótica en la fabricación de palas de aerogeneradores, lo que mejora la consistencia del producto y elimina las difíciles condiciones de trabajo para los humanos. Esta tecnología permitirá aumentar la seguridad y el bienestar de los empleados, a la vez que ayuda a los fabricantes a conservar la mano de obra cualificada.
Automatización para mejorar la fabricación de palas de aerogeneradores
En un artículo publicado en la revista Wind Energy y citado por Mining, los científicos del NREL explican que las operaciones posteriores al moldeo para la fabricación de palas de aerogenerador requieren que los trabajadores realicen su tarea en andamios y con trajes de protección, lo que genera dificultades y riesgos laborales. La automatización de este proceso de acabado mejora la seguridad y el bienestar de los empleados y ayuda a que los fabricantes sean más competitivos a nivel mundial en términos de costos.
El beneficio de la automatización en la fabricación nacional de palas offshore
La investigación llevada a cabo en las instalaciones Composites Manufacturing Education and Technology (CoMET) del Campus Flatirons del NREL demuestra que la automatización en la fabricación de palas offshore en Estados Unidos puede ser más viable económicamente. Según Hunter Huth, autor principal del artículo, la fabricación nacional de palas offshore no es común en EE.UU. debido a los altos costos de mano de obra y la dificultad del trabajo. Con la implementación de la automatización, se elimina el alto índice de rotación y se reduce la necesidad de mano de obra cualificada, lo que hace que la fabricación de palas offshore sea más competitiva en términos de costos.
La aplicación de la automatización en el trabajdo del robot
Durante la investigación, se utilizó un robot en un segmento de pala de aerogenerador de 5 metros de longitud en las instalaciones CoMET. Con la ayuda de escáneres, se creó una representación tridimensional de la posición de la pala y se identificaron las secciones delantera y trasera del perfil aerodinámico. Posteriormente, se programó al robot para realizar una serie de tareas y se evaluó su precisión y velocidad. Se encontraron áreas de mejora, especialmente en el afilado de la pala. El equipo de investigadores considera que, una vez perfeccionado, este sistema automatizado proporcionará una uniformidad en la fabricación de palas que no es posible cuando los humanos realizan todo el trabajo. Además, un robot puede utilizar «abrasivos más duros y agresivos» que los que podría tolerar un humano, según lo señalado por Hunter Huth.