El zinc lidera el repunte con un crecimiento interanual de 29,2%, impulsando la producción metálica nacional en un contexto de fortalecimiento del mercado global de materias primas.
La minería peruana continúa consolidando su posición como uno de los pilares de la economía nacional y motor de exportaciones del país. De acuerdo con el más reciente Boletín Estadístico Minero (BEM) publicado por el Ministerio de Energía y Minas (MINEM), la producción nacional registró en agosto de 2025 incrementos significativos en seis de sus principales minerales: zinc (+29,2%), oro (+8,1%), hierro (+7,6%), estaño (+3,6%), plata (+2,1%) y plomo (+1,5%) en comparación con el mismo mes del año anterior.
Estos resultados reflejan una recuperación sostenida del sector en un escenario internacional de reactivación de los mercados mineros, marcado por la mayor demanda de metales industriales y precios más estables tras un periodo de volatilidad global.
Zinc: el gran impulsor de la producción minera
El zinc fue el mineral de mayor crecimiento en agosto, con un incremento intermensual de 17,2% y una expansión interanual de 29,2%. En el acumulado entre enero y agosto de 2025, la producción subió 16,1% respecto al mismo periodo de 2024.
La región de Áncash se mantiene como líder absoluto en este segmento, aportando 40,9% de la producción nacional, seguida por Junín (15,7%) y Lima (12,0%).
Este repunte responde al aumento de operaciones en minas de gran escala y a la reanudación de proyectos que habían reducido actividad durante 2023, debido a ajustes logísticos y climáticos.
Oro: dinamismo sostenido y liderazgo del norte peruano
El oro, uno de los metales más emblemáticos del Perú, también experimentó un notable avance. En agosto, la producción creció 6,1% respecto a julio y 8,1% interanual, impulsada principalmente por la mayor extracción en La Libertad (27,8%), Cajamarca (24,5%) y Arequipa (21,8%).
Las empresas auríferas han reforzado su producción ante la estabilidad del precio internacional del metal, que se ha mantenido sobre los US$ 2.300 por onza, generando condiciones favorables para la inversión y la continuidad de operaciones.
Cobre y plata mantienen el ritmo ascendente
La producción de cobre, el principal producto de exportación peruano, aumentó 6,5% en comparación al mes anterior, y acumuló un avance de 2,6% entre enero y agosto frente al mismo periodo de 2024.
Las regiones de Moquegua (18,0%), Apurímac (15,4%) y Arequipa (15,1%) concentraron la mayor parte de la producción, destacando el rol de minas de gran envergadura que consolidan la posición del país como el segundo productor mundial de cobre.
Por su parte, la plata registró en agosto un repunte intermensual de 17,2% y un crecimiento acumulado de 7,4% durante los primeros ocho meses del año.
Las regiones líderes en este mineral fueron Lima (19,8%), Áncash (19,2%) y Pasco (14,1%), donde la reactivación de unidades mineras ha permitido mejorar la recuperación de mineral y elevar los niveles de procesamiento.
Plomo, hierro y estaño consolidan la tendencia positiva
La producción de plomo alcanzó 27.038 toneladas métricas finas (TMF) en agosto, registrando un aumento mensual de 2,7% y una variación acumulada positiva de 6,0% en lo que va del año.
La región de Pasco mantiene el liderazgo con 30,4% de la producción nacional, seguida por Lima (19,2%) y Junín (12,0%).
En el caso del hierro, la producción nacional aumentó 7,6% interanual, sustentada por la mejora en los indicadores operativos de las minas de la costa sur. Mientras tanto, el estaño registró un crecimiento de 3,6% respecto a agosto de 2024, mostrando una recuperación gradual impulsada por la estabilidad del mercado internacional.
El Perú reafirma su posición en el mapa minero mundial
Con estos resultados, el sector minero peruano reafirma su resiliencia y su rol como motor estratégico de la economía nacional. Las cifras del MINEM muestran que, pese a los desafíos logísticos, ambientales y sociales, la minería peruana continúa generando inversión, empleo y divisas, al tiempo que impulsa el desarrollo regional.
La frase clave del informe —“reactivación minera en un contexto de estabilidad internacional”— resume el momento que vive el país: un renacer productivo acompañado de una mayor demanda mundial de minerales críticos para la transición energética y la manufactura global.




