El metal precioso alcanza su mayor nivel histórico mientras los mercados anticipan una relajación monetaria en Estados Unidos.
El precio del oro avanzó este viernes un 0,8% hasta los US$ 4.010,72 por onza, impulsado por la expectativa de que la Reserva Federal (Fed) reduzca las tasas de interés en diciembre, en medio del debilitamiento del mercado laboral y la prolongada paralización del Gobierno estadounidense. Los futuros del metal para entrega en diciembre subieron 0,7%, a US$ 4.019,50.
De acuerdo con el analista independiente Ross Norman, la tendencia alcista del oro “se mantiene firme” gracias a la combinación de compras de bancos centrales y la creciente probabilidad de recortes de tasas. Datos recientes mostraron una pérdida de empleos en sectores como el gubernamental y el minorista durante octubre, afectados por medidas de reducción de costos y automatización mediante inteligencia artificial.
La debilidad del empleo elevó las probabilidades de un recorte de tasas en diciembre al 67%, frente al 60% estimado antes de la publicación de los datos, según operadores del mercado. Soni Kumari, estratega de materias primas de ANZ, destacó que la atención del mercado se centra en los próximos indicadores macroeconómicos y en la resolución del cierre del Gobierno, factores que han fortalecido la demanda de refugio en el oro.
El estancamiento legislativo en el Congreso mantiene paralizado al Gobierno federal, en lo que ya constituye el cierre más prolongado de la historia del país. Esta situación ha limitado el acceso de la Fed a datos económicos oficiales, forzando al banco central a apoyarse en fuentes privadas para evaluar la evolución de la economía.
En el mercado de metales preciosos, la plata subió un 1,7% a US$ 48,8 la onza, el platino avanzó un 0,9% a US$ 1.554,66 y el paladio aumentó un 1,5% hasta US$ 1.395,5.

