El precio del cobre subió 1%, acercándose a los 11,000 dólares por tonelada, impulsado por preocupaciones respecto al suministro global.
Preocupaciones por oferta y comercio fortalecen al cobre
El valor del cobre en la Bolsa de Metales de Londres (LME) alcanzó este viernes los 10,960 dólares por tonelada, impulsado por crecientes incertidumbres sobre la oferta y un renovado optimismo respecto a las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China. En su punto más alto de la jornada, el metal alcanzó los 10,979.50 dólares, marcando su mayor nivel desde el 9 de octubre, cuando tocó un máximo de 16 meses con 11,000 dólares por tonelada.
De concretarse esta tendencia, el cobre cerraría la semana con un incremento del 3,3%, posicionándolo como uno de los activos más destacados entre los metales básicos. Según Angel John Meyer, analista de SP, “creo que el cobre seguirá subiendo (…) simplemente porque hay una escasez en desarrollo como resultado del alud de lodo en Grasberg y la necesidad continua de cobre, sobre todo en China, pero también en todo el mundo”.
La situación en la mina Grasberg, operada por Freeport en Indonesia, ha agravado este escenario. Desde un incidente ocurrido el 8 de septiembre, la mina permanece cerrada, lo que ha reducido considerablemente la oferta global de cobre. Además, la minera chilena Antofagasta anunció que su producción para 2025 estaría en el umbral inferior de su previsión de entre 660,000 y 700,000 toneladas, lo que aumentaría las presiones sobre el mercado.
Baja en inventarios y arbitrajes complejos
A esto se suma la caída en las existencias del cobre registradas en la LME, que descendieron a 136,350 toneladas, el nivel más bajo desde finales de julio. Meyer advirtió que el cobre podría enfrentar una contracción similar a la observada en el zinc, considerando que las fundiciones chinas involucradas en el arbitraje Londres-Shanghái podrían verse afectadas por la falta de metal físico. Esto, conforme avanza la demanda en un mercado cada vez más competitivo y estrecho.
Mientras tanto, otros metales básicos mostraron movimientos divergentes durante la jornada. El aluminio retrocedió un 0,2%, cerrando en 2,856 dólares por tonelada, tras haber alcanzado un máximo de 2,883.5 dólares, su mayor nivel desde mayo de 2022. En contraste, el zinc avanzó un 0,2%, llegando a 3,020.5 dólares, mientras que el plomo subió un 0,3% hasta los 2,015 dólares. Por su parte, el níquel y el estaño aumentaron 0,1% cada uno, situándose en 15,360 dólares y 35,670 dólares, respectivamente.
En el ámbito geopolítico, el anuncio de que el presidente estadounidense Donald Trump y su homólogo chino Xi Jinping planean reunirse para conversaciones formales en Corea del Sur genera expectativas positivas sobre un posible alivio en las tensiones comerciales, lo que podría tener un impacto posterior en la demanda global de metales como el cobre.
