La unión de Anglo American y Teck Resources, valorada en 53 mil millones de dólares, podría dar vida al mayor productor de cobre global hacia la década de 2030. El plan considera integrar Collahuasi y Quebrada Blanca, con el potencial de superar la producción histórica de Escondida en Chile.
El trasfondo: Escondida como referente mundial
Por décadas, Escondida —operada por BHP junto a otros socios— ha sido el líder indiscutido en producción de cobre. Solo en 2024 aportó cerca de 1,28 millones de toneladas, consolidándose como la mina más grande del planeta en este metal clave para la transición energética.
El nuevo escenario surge con la anunciada fusión Anglo-Teck, que busca crear un complejo minero integrado en el norte de Chile. De concretarse, este movimiento no solo modificaría el mapa productivo local, sino también el balance de poder en la industria del cobre a nivel mundial.
¿Qué significa la fusión Anglo-Teck?
La clave de la transacción está en unir la mina Quebrada Blanca (QB) de Teck con Collahuasi, donde Anglo American es socio. El proyecto contempla instalar un sistema de correas transportadoras de 15 kilómetros para llevar mineral de alta ley desde Collahuasi hacia las plantas de procesamiento de QB.
Según estimaciones de analistas, esta integración podría aportar cerca de un millón de toneladas de cobre al año, con un extra de 175 mil toneladas anuales entre 2030 y 2049, reduciendo costos y plazos en comparación con iniciar un proyecto desde cero.
Si los cálculos se cumplen, Anglo-Teck alcanzaría las 1,35 millones de toneladas anuales, superando a Escondida y posicionándose entre los cinco mayores productores de cobre a nivel global. Además, sería la mayor transacción minera de la última década.
Impacto económico y proyecciones
Las compañías anticipan 800 millones de dólares en sinergias anuales antes de impuestos, y hasta 1.400 millones en EBITDA adicional gracias a la eficiencia operativa y optimización en compras.
Expertos como George Cheveley señalan que estas proyecciones incluso podrían estar por debajo del potencial real de expansión del complejo en las próximas décadas.
Riesgos y desafíos
No obstante, el camino no está libre de obstáculos:
- Quebrada Blanca ha enfrentado sobrecostos, problemas de estabilidad en el tajo, detenciones en planta y dificultades en la gestión de relaves.
- Collahuasi tiene el desafío de coordinación, ya que Anglo American no posee control absoluto: Glencore y otros socios también participan en la operación.
- Ejecución: resolver los problemas de QB será clave para competir con la confiabilidad y escala de Escondida.
Wood Mackenzie estima que el valor de Teck ronda los 10.800 millones de dólares post-impuestos, pero advierte que esta cifra considera los riesgos actuales y no las sinergias que podría generar la integración con Collahuasi.