Tras reportar un descenso de 8,5% en marzo de este año, la minería durante 2023 “irá de menos a más”, con un crecimiento en torno al 3% y una producción de cobre cercana a los 5,5 millones de toneladas, esto es, del orden de 200 mil toneladas más que lo producido en el ejercicio 2022. Así lo proyectó el gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Álvaro Merino, al referirse al Imacec de marzo, que cayó 2,1% interanual.
El experto reconoció que el desempeño de la economía “fue peor que lo estimado por el mercado que proyectaba una caída de 1%”, influido principalmente por la minería con un descenso de 8,5% y el comercio con una menor actividad de 5,4%.
“Prácticamente todos los productos mineros mostraron una contracción tanto metálicos como no metálicos, a excepción de la producción de oro que registró un crecimiento de 34%, lo que contribuyó a amortiguar una mayor caída de la actividad minera”, aseguró.
El ejecutivo de Sonami dijo que el importante retroceso de la minería se explica fundamentalmente por la menor producción de cobre, que genera el 90% del PIB minero, debido a la baja en las leyes del mineral, a lo que se agrega problemas técnicos en algunas faenas mineras y junto a lo anterior se observó menor tratamiento de este mineral.
“Esperamos que en los meses venideros se revierta la caída mostrada en marzo por la actividad minera, pues la producción minera y particularmente la de cobre debiera aumentar por la entrada en producción de nuevos proyectos y por el incremento de actividad de importantes faenas en operación”, concluyó Álvaro Merino.
Fuente: Diario Financiero
Foto: DF
