El gigante brasileño subraya la interdependencia estructural entre la industria siderúrgica china y los grandes exportadores del insumo, en medio de tensiones por la centralización de compras de Pekín.
China no puede romper con sus principales proveedores de mineral de hierro, advierte Vale.
La tensión entre China y sus principales proveedores de mineral de hierro vuelve a ocupar el primer plano del mercado global. La brasileña Vale S.A., uno de los mayores productores del mundo, advirtió que una ruptura en la cadena de suministro sería perjudicial tanto para los exportadores como para la industria siderúrgica china, cuya dependencia de las importaciones sigue siendo estructural.
Durante una conferencia de prensa realizada este viernes en São Paulo, el director financiero de Vale, Marcelo Bacci, enfatizó la necesidad de manejar con prudencia el nuevo escenario comercial. “No le conviene a nadie tensar esta situación, porque podría derivar en una disrupción en la cadena de suministro. Y eso sería negativo para todos los actores involucrados”, declaró el ejecutivo.
La centralización de compras bajo el ojo de Pekín
El llamado a la moderación ocurre mientras el gobierno chino intensifica su estrategia de control sobre el comercio de minerales. En 2022, Pekín creó China Mineral Resources Group (CMRG), una empresa estatal concebida para centralizar las adquisiciones de mineral de hierro y aumentar su poder de negociación frente a los grandes productores internacionales —entre ellos Vale, BHP y Rio Tinto—, que dominan cerca del 60 % del mercado mundial.
Desde su creación, CMRG ha buscado alterar el modelo de transacciones que ha prevalecido durante décadas. Entre las medidas más controversiales figura su reciente intento de reducir el uso del dólar estadounidense en operaciones con BHP, decisión alineada con la política de “desdolarización” promovida por China para disminuir su exposición al sistema financiero norteamericano.
Respuesta de Vale: pragmatismo y cooperación operativa
Consultado sobre el impacto de estos cambios, Bacci explicó que Vale no mantiene contratos de largo plazo ni precios fijos con CMRG, aunque sí conserva una relación fluida y funcional. “Tenemos una relación bastante positiva con CMRG. Hemos ofrecido soluciones logísticas adaptadas a sus necesidades, sin alterar los fundamentos del negocio”, señaló.
El ejecutivo detalló que la empresa ajustó su red de distribución y puertos de embarque para facilitar la logística de envío hacia China, uno de sus principales destinos comerciales. Según Vale, estas medidas buscan optimizar la eficiencia sin comprometer la rentabilidad ni la independencia en la fijación de precios internacionales.
Pekín cuestiona la “irracionalidad” del mercado
La postura oficial de CMRG también ha endurecido el tono. Esta semana, su unidad de investigación calificó como “irracional” la actual estructura de precios del mineral de hierro, acusando a las grandes mineras de mantener un sistema injusto que eleva artificialmente los costos para las siderúrgicas chinas. El grupo estatal afirmó que impulsará reformas para equilibrar el poder entre productores y consumidores.
Las quejas, sin embargo, no son nuevas. Desde hace más de una década, China expresa su descontento ante lo que considera una excesiva concentración de la oferta mundial. La creación de CMRG respondió justamente a esa preocupación, buscando unificar la demanda interna y así mejorar el poder negociador del país.
Interdependencia estructural entre China y Brasil
Pese a las tensiones, Vale insiste en que la interdependencia entre China y sus proveedores limita cualquier escenario de ruptura. Brasil, segundo mayor exportador mundial del mineral después de Australia, suministra un producto de alta ley, con bajo contenido de impurezas y menores emisiones en la producción de acero. Estos atributos son fundamentales en momentos en que China intenta descarbonizar su industria pesada, uno de los sectores más contaminantes del planeta.
El gigante asiático importa más de mil millones de toneladas de mineral de hierro al año, y aunque ha intentado impulsar su producción local, la calidad del mineral chino sigue siendo significativamente inferior a la de sus principales proveedores. Además, la explotación interna enfrenta limitaciones ambientales y geológicas, lo que restringe su expansión sin aumentar los costos o el impacto ecológico.
En ese contexto, la posibilidad de prescindir de socios estratégicos como Vale parece más retórica que realista. CMRG aún debe equilibrar los objetivos políticos del gobierno con las necesidades operativas de una industria que produce más de la mitad del acero mundial.
Un mercado atento y una advertencia clara
El mercado financiero reaccionó con moderación tras las declaraciones. Las acciones de Vale subieron 2,7 % en la bolsa de São Paulo, impulsadas por resultados positivos del tercer trimestre y un anuncio de mayores dividendos. Sin embargo, analistas advierten que un deterioro en la relación comercial con China podría afectar el flujo más grande del mercado global de commodities, con consecuencias para precios, fletes y márgenes en toda la cadena del acero.
Más que un desafío a la autoridad de Pekín, la advertencia de Vale busca subrayar una realidad estructural: China no puede romper con sus principales proveedores de mineral de hierro sin comprometer la estabilidad de su sector industrial. El acero sigue siendo la columna vertebral de su infraestructura y su expansión económica depende, en buena medida, de un flujo constante y confiable de materias primas.
Un equilibrio frágil
El futuro inmediato dependerá de la capacidad de ambas partes para mantener un equilibrio entre control político y racionalidad económica. Si las tensiones se moderan, China podrá avanzar en su agenda de eficiencia sin poner en riesgo el suministro. Pero si las presiones continúan, el impacto podría sentirse en todo el sistema global del acero.
Vale, por ahora, opta por la cooperación técnica y la diplomacia comercial. “Las relaciones deben ser de largo plazo y basadas en confianza mutua”, concluyó Bacci. “Los intereses de China y de Brasil están mucho más alineados de lo que algunos creen.”
