Vale y Glencore evalúan proyecto conjunto en Canadá para potenciar producción de cobre y enfrentar demanda por metales críticos.
Importante alianza estratégica en la cuenca de Sudbury
Vale SA y Glencore Plc están en proceso de evaluar una alianza estratégica destinada a desarrollar un proyecto de cobre en la cuenca de Sudbury, Canadá. Este proyecto, valorado entre US$1,600 y US$2,000 millones, busca aprovechar las propiedades vecinas de ambas compañías en una de las regiones mineras más importantes de América del Norte. Según Vale, la producción estimada sería de 880,000 toneladas métricas de cobre durante un período de 21 años, además de subproductos como níquel, cobalto, oro y otros minerales críticos.
El contexto global, caracterizado por el incremento en la demanda de cobre para redes eléctricas, vehículos eléctricos y energías renovables, ha llevado a las empresas a explorar esta colaboración tras dos décadas de negociaciones. Este acuerdo les permitiría contener costos, incrementar eficiencia y reforzar su posicionamiento en un mercado en el que se proyecta escasez del metal. Según analistas, estas decisiones estratégicas están alineadas con la creciente necesidad de cobre en aplicaciones tecnológicas y energías limpias.
Plan a futuro y sinergias geológicas
Como parte del acuerdo preliminar, las compañías explorarían una integración de sus operaciones subterráneas en Sudbury. El plan contempla la profundización del pozo existente en la mina Nickel Rim South de Glencore, el desarrollo de nuevas galerías para depósitos de cobre, y una posible operación conjunta de infraestructura y procesamiento. Según el informe, la asociación se construiría en un esquema de empresa conjunta al 50%, compartiendo capital, riesgos y beneficios en la producción de metales críticos como níquel, cobalto y oro, esenciales para tecnologías limpias y baterías.
El proyecto también se alinea con los objetivos de Vale de duplicar su capacidad de metales básicos para alcanzar 700,000 toneladas anuales para el 2035. Este compromiso refuerza su posición estratégica en un mercado competitivo, considerando además que la empresa busca consolidaciones que le permitan un mayor crecimiento. Por su parte, Glencore enfrenta el reto de compensar una caída en su producción de cobre, proyectada por cuarto año consecutivo.