El sector minero de Australia ha registrado un hito histórico al contribuir con un récord de 455.000 millones de dólares australianos en ingresos de exportación durante el año fiscal 2022-23, según datos recientes de la Oficina de Estadísticas de Australia (ABS).
Esta cifra representa dos tercios de todos los ingresos por exportaciones del país y supone un aumento del 10,5 % con respecto al año anterior, 2021-22, que ya había sido un año récord en términos de ingresos por exportaciones.
El informe revela que los ingresos de exportación de Australia provenientes del carbón ascendieron a 128.000 millones de dólares australianos, consolidándolo como el principal contribuyente. Le siguió el mineral de hierro, que aportó 125.000 millones de dólares australianos, mientras que el oro contribuyó con 27.400 millones de dólares australianos, el aluminio con 14.900 millones de dólares australianos y el cobre con 12.500 millones de dólares australianos.
Los datos también muestran un notable crecimiento en las exportaciones de metales relacionados con tecnología de energía limpia, como el níquel (51 %), el zinc (30 %) y el cobre (17 %). Además, las exportaciones de carbón continuaron creciendo un 11 %, mientras que el oro experimentó un crecimiento del 5 % durante el año financiero.
Un informe previo del Departamento de Industria, Ciencia y Recursos del Gobierno de Australia publicado en abril predijo que los ingresos por los minerales críticos igualarán a los del carbón para el año 2028. El crecimiento en la demanda de materiales de tecnología renovable, incluyendo el litio, el níquel, el cobalto y los metales de tierras raras, se espera que experimente un significativo aumento en esta década, mientras que el interés en el carbón ya ha alcanzado su punto máximo, según el informe. Además, se predice que los ingresos por exportaciones de carbón térmico caerán a 19.000 millones de dólares australianos, un tercio menos que los niveles actuales, para el año 2027-28.
El Consejo de Minerales de Australia, una asociación industrial partidista que representa a las principales empresas mineras del país, destaca que durante la última década, la contribución total de los minerales, metales y materias primas energéticas a los ingresos de exportación ha alcanzado la asombrosa cifra de 2,7 billones de dólares australianos.
A pesar de estos logros récord en los ingresos por exportaciones, las estadísticas separadas de la ABS también señalan que la industria minera informó la mayor caída en el volumen de negocios entre las 13 industrias seleccionadas. Robert Ewing, jefe de indicadores comerciales de ABS, explica que esta disminución del 6 % en la facturación minera en mayo se debió a la caída en la demanda y los precios de materias primas como el mineral de hierro y el carbón, que se alejaron de sus máximos recientes. No obstante, se ha observado un aumento en la facturación mensual en 11 de las 13 industrias seleccionadas en mayo, lo que representa una señal de recuperación económica en el país.
En general, el sector minero de Australia ha demostrado un fuerte desempeño y se ha consolidado como un pilar fundamental de la economía australiana, impulsando el crecimiento económico y la generación de ingresos a través de sus exportaciones de minerales y metales a nivel mundial.