El PNUMA y la IGF han publicado un informe identificando estándares globales de sostenibilidad en minería, revelando retos regulatorios y ambientales.
Más de 100 estándares de sostenibilidad minera analizados
El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y el Foro Intergubernamental sobre Minería, Minerales, Metales y Desarrollo Sostenible (IGF) presentaron el Inventario de Normas e Iniciativas de Sostenibilidad (SSI). Este documento identifica más de 100 estándares activos dentro de las cadenas de valor de los minerales y metales, revelando un escenario de alta fragmentación en sus enfoques y objetivos.
El objetivo principal de este inventario es analizar cómo estos estándares interactúan con las legislaciones existentes y en qué medida pueden fortalecer la gobernanza ambiental en el sector minero. Según el informe, estas normas han proliferado notablemente en las últimas dos décadas, ocasionando un entorno complejo para gobiernos, empresas y comunidades. Existen criterios superpuestos y enfoques divergentes que dificultan su implementación óptima, pero también se señalan áreas en las que podrían agregar valor si son diseñadas adecuadamente y alineadas con objetivos regulatorios.
Recomendaciones para una gobernanza minera más eficiente
El informe del PNUMA e IGF hace hincapié en las oportunidades de mejora que estos estándares e iniciativas pueden ofrecer. Entre ellas se incluyen la capacidad de elevar las metas ambientales por sobre los requisitos legales, facilitar herramientas de monitoreo y promover la transparencia en la recopilación y gestión de datos. También destacan su potencial para fomentar la cooperación entre los distintos actores de la cadena de suministro minera.
A pesar de estos beneficios, el informe advierte que estas normas no deberían reemplazar la regulación estatal, al contrario, deben complementarla. Además, subraya que un diseño inadecuado podría resultar en estándares que fomenten prácticas como el maquillaje verde o que impliquen cargas desproporcionadas sin un verdadero impacto ambiental o social. Para contrarrestar estos riesgos, se proponen evaluaciones independientes de impacto y mayor interoperabilidad entre las diferentes normas existentes.

