Los precios de la gasolina en Estados Unidos caen por 10ª semana consecutiva

Los precios de la gasolina en Estados Unidos bajaron por décima semana consecutiva, según los últimos datos de Gas Buddy.

Los precios de la gasolina han retrocedido durante 10 semanas consecutivas, cayendo otros 5,1 céntimos desde hace una semana hasta los 3,60 dólares por galón el lunes.

La media nacional de los precios de la gasolina ha bajado 51,3 céntimos con respecto a hace un mes, aunque sigue siendo superior en términos interanuales en 72,2 céntimos.

Los estadounidenses pagan ahora 450 millones de dólares menos por la gasolina que a mediados de junio.

«Mientras que en algunas zonas los precios de la gasolina subieron ligeramente la semana pasada, la media nacional experimentó otro descenso semanal, ampliando la racha a diez semanas consecutivas».

«El ritmo de los descensos se está ralentizando ciertamente, ya que los precios del petróleo han repuntado ligeramente, pero la costa oeste y el noreste de EE.UU. son zonas que todavía pueden ver descender los precios de la gasolina, mientras que el sur y el medio oeste ven cómo se desvanece la caída y se producen ligeras subidas», declaró el lunes el jefe de análisis del petróleo, Patrick De Haan, quien añadió que la proximidad de la temporada alta de huracanes «sigue siendo un comodín».

El descenso de los precios de la gasolina

El descenso de los precios de la gasolina se debe en gran medida a la caída de los precios del crudo, ya que el WTI ha bajado casi 10 dólares por barril en los últimos 30 días. Sólo el lunes, el WTI bajó 3,53 dólares por barril, lo que supone una caída del 3,89% para la referencia estadounidense.

Los precios del crudo han caído durante la última semana, ya que el mercado teme una desaceleración económica que podría tener un impacto negativo en la demanda. Aun así, el mercado del petróleo sigue siendo ajustado, y los inventarios se reducen, lo que tapa las pérdidas derivadas de los temores a la recesión.

Los datos de Gas Buddy de la semana pasada mostraron un pequeño descenso de la demanda de gasolina del 1%, con la mayor destrucción de la demanda procedente de PADD 2.

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