Luz verde a la nueva Fundición Paipote: Enami obtiene aprobación ambiental para proyecto de US$1.700 millones

La modernización de la planta Hernán Videla Lira marca un hito para la industria cuprífera y el desarrollo sustentable de la Región de Atacama.

La Comisión de Evaluación Ambiental (Coeva) de la Región de Atacama aprobó por unanimidad el proyecto de modernización de la Fundición Hernán Videla Lira, más conocida como Fundición Paipote, iniciativa impulsada por la Empresa Nacional de Minería (Enami) que contempla una inversión estimada en US$1.700 millones.

Se trata de un paso decisivo para el único proyecto de fundición y refinería de cobre actualmente en marcha en Chile, cuya ejecución permitirá incorporar tecnología de última generación, reducir significativamente las emisiones y reforzar la cadena de valor de la minería nacional, especialmente de la pequeña y mediana minería.

El proyecto Nueva Paipote permitirá a Chile contar con una planta de fundición con tecnología inédita, eficiencia energética y estándares ambientales superiores al 99% en captura de emisiones.

Un proyecto estratégico para el país y la Región de Atacama

La decisión de la Coeva fue calificada como un “hito histórico” por las autoridades del sector. El vicepresidente ejecutivo de Enami, Iván Mlynarz, destacó que la resolución “permite avanzar hacia la construcción de una planta moderna, con tecnología inédita en Chile y claras ventajas ambientales”.

Por su parte, la ministra de Minería, Aurora Williams, enfatizó el alcance nacional de la iniciativa:

“Estamos dando un paso fundamental para cumplir el compromiso del Gobierno de habilitar una nueva fundición en Chile, con los más altos estándares ambientales. Este complejo no solo fortalecerá la minería de Atacama, sino que también permitirá al país responder a la demanda global de minerales críticos con una operación rentable y sustentable”.

El proyecto contempla una capacidad de procesamiento de 850.000 toneladas anuales de concentrado de cobre, además de una refinería electrolítica que producirá 240.000 toneladas de cátodos. Esta modernización reemplazará las antiguas instalaciones, que datan de la década de 1950, posicionando a Enami como referente en fundiciones limpias y eficientes en Sudamérica.

El delegado presidencial de Atacama, Rodrigo Illanes, subrayó que la iniciativa “abrirá un sinnúmero de oportunidades para la región, generando empleo, dinamismo económico y fortaleciendo el tejido productivo local”.

Tecnología limpia y eficiencia operativa

Uno de los principales atributos de Nueva Paipote es su diseño ambiental de vanguardia. La planta operará con un sistema de captura de gases superior al 99%, lo que reducirá de manera sustantiva las emisiones de dióxido de azufre (SO₂) y material particulado, en línea con las exigencias de la normativa internacional.

El complejo integrará recuperación energética y utilizará agua desalada para sus procesos, minimizando el uso de recursos hídricos continentales. Enami detalló que el sistema de desalinización estará conectado a la costa a través de un acueducto de alta eficiencia, lo que garantizará la sustentabilidad del suministro sin afectar fuentes naturales.

Con estas características, la fundición se proyecta como la más moderna del país y una de las más limpias de la región, contribuyendo a que Chile avance hacia una minería más verde y trazable.

Impacto económico y encadenamientos productivos

La aprobación ambiental del proyecto representa una señal de confianza para la industria minera, particularmente en un contexto de transición energética global que ha incrementado la demanda de cobre y minerales críticos.

Según estimaciones preliminares, durante su fase de construcción, Nueva Paipote generará más de 3.000 empleos directos e indirectos, mientras que en su etapa operativa mantendrá cerca de 1.000 puestos permanentes.

Asimismo, se espera un efecto multiplicador en proveedores locales, servicios logísticos y contratistas regionales, lo que aportará dinamismo al PIB regional y fortalecerá la base económica de Atacama.

El proyecto también es clave para reactivar el rol de Enami como articulador del sector minero, al ofrecer servicios de fundición y refinación competitivos para la pequeña y mediana minería, que representan una parte significativa de la producción nacional de concentrados.

Financiamiento y estructura de gestión

Una vez obtenida la Resolución de Calificación Ambiental (RCA), Enami deberá tramitar las autorizaciones sectoriales y financieras necesarias. El directorio de la empresa aprobó la creación de Proyecta Enami SpA, filial 100% estatal que tendrá a su cargo el diseño, construcción y puesta en marcha del complejo.

En paralelo, la estatal evalúa opciones de financiamiento mixto, incluyendo un proceso de offtake —mecanismo por el cual inversionistas o entidades financieras aportan capital a cambio de suministro futuro de cátodos—. En este proceso participan bancos internacionales, fondos de inversión, compañías mineras y traders especializados.

De acuerdo con fuentes cercanas al proyecto, Enami busca cerrar su esquema de financiamiento antes de mediados de 2026, para iniciar obras principales durante el segundo semestre de ese año.

Proyecciones: hacia una nueva era de fundiciones chilenas

La modernización de Paipote marca el renacimiento de la industria de fundiciones en Chile, tras décadas de rezago tecnológico y cuestionamientos ambientales. Con Nueva Paipote, el país recupera capacidad para agregar valor a su producción cuprífera y reducir la dependencia de exportar concentrados sin refinar.

Si se cumplen los plazos proyectados, la planta podría iniciar operaciones en 2029, consolidando a Enami como una empresa pública de nueva generación, orientada a la sostenibilidad, la eficiencia y la innovación industrial.

En palabras de la ministra Williams, “Nueva Paipote simboliza la minería del futuro: limpia, moderna y comprometida con las comunidades. Un paso firme hacia una minería chilena más competitiva y sostenible”.

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