La compañía australiana proyecta ingresar su Declaración de Impacto Ambiental a inicios de 2026 y prepara una ambiciosa campaña de perforaciones, en un contexto de precios favorables del cobre y creciente interés por nuevos desarrollos en la provincia del Huasco.
La empresa minera Norfolk Metals continúa dando pasos decisivos en el desarrollo de su proyecto de cobre Carmen, emplazado en la provincia del Huasco, Región de Atacama, específicamente en las cercanías de la comuna de Alto del Carmen. La iniciativa avanza actualmente en su fase de evaluación ambiental y estudios técnicos, con el objetivo de sentar las bases para una campaña intensiva de exploración durante 2026.
Según informó la compañía, ya se completaron los estudios de línea base ambiental requeridos para la presentación de una Declaración de Impacto Ambiental (DIA), los que incluyeron levantamientos detallados de flora, fauna, paleontología y arqueología. Estos antecedentes permitirán a Norfolk Metals ingresar formalmente su DIA ante el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental a comienzos del próximo año, siempre que no se identifiquen observaciones relevantes en la etapa previa.
De obtener una resolución favorable, el permiso ambiental tendría una vigencia de cinco años y habilitaría a la empresa para ejecutar un programa de perforación de mayor escala en su paquete de concesiones, que abarca una superficie aproximada de 46,6 kilómetros cuadrados. Dichos trabajos considerarían perforaciones de seguimiento al programa diamantino actualmente en curso, así como nuevas campañas orientadas a avanzar hacia la estimación de recursos.
En paralelo al proceso regulatorio, la compañía ha encargado a consultores especializados en Chile estudios relacionados con el abastecimiento de agua, un aspecto clave para el eventual desarrollo del proyecto. Estas evaluaciones consideran distintos escenarios, incluyendo un posible procesamiento mediante lixiviación en pilas, y analizan tanto fuentes hídricas locales como alternativas de desalinización externa. Los resultados preliminares se encuentran en su fase final.
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En materia de infraestructura, Norfolk Metals destacó que el proyecto cuenta hoy con una base operativa completamente habilitada, desarrollada tras la reciente campaña de perforación de circulación reversa. Esta instalación incluye áreas para el procesamiento y almacenamiento de testigos, y se ubica en las cercanías de Alto del Carmen, con accesos viales operativos durante todo el año.
El presidente ejecutivo de la firma, Ben Phillips, señaló que el trabajo técnico se complementa con un proceso de relacionamiento territorial continuo. Asimismo, indicó que durante el primer trimestre de 2026 se espera contar con un mayor flujo de información geológica, a partir de los resultados finales del programa RC y de análisis de núcleos históricos, con miras a definir un recurso conforme al estándar JORC.
El proyecto Carmen se sitúa a solo 16 kilómetros del megaproyecto Nueva Unión, de Teck Resources y Newmont, lo que refuerza el potencial geológico del sector. En un escenario marcado por precios del cobre al alza, Norfolk Metals busca consolidar los hitos técnicos y ambientales necesarios para avanzar hacia una futura producción de cobre de bajo costo en Atacama.
