China busca fortalecer su rol financiero global al custodiar reservas de oro extranjeras a través de la Bolsa de Oro de Shanghái. Esta estrategia, liderada por el Banco Popular de China, apunta a posicionar a Beijing como custodio de oro soberano de otros países aliados, marcando un avance en la desdolarización y reduciendo la dependencia del dólar y de centros financieros occidentales como Estados Unidos, Reino Unido y Suiza.
El Banco Popular de China está implementando esta estrategia con el objetivo de atraer a los bancos centrales de países aliados para comprar y almacenar oro en China, a través de la Bolsa de Oro de Shanghái. Esta movida pretende fortalecer la influencia de China en el mercado global del metal precioso y ofrecer una alternativa confiable en un contexto de crecientes tensiones geopolíticas.
En un contexto en el que los países han incrementado sus compras de oro como medida contra los riesgos económicos, China busca posicionarse como un refugio alternativo. Esto ha contribuido al repunte del precio del oro, que recientemente alcanzó máximos históricos. Según analistas, esta estrategia de custodiar reservas extranjeras podría apuntar a un paso más en la campaña de desdolarización, lo que también beneficiaría al oro como activo refugio.
A pesar de que las reservas de oro informadas por el Banco Popular de China son menores que las almacenadas en el Banco de Inglaterra, que es un centro global líder en custodia de oro, China cuenta con el quinto mayor volumen de reservas y el mercado interno de oro más grande del mundo. La apertura de la Bolsa de Oro de Shanghái en Hong Kong y la introducción de contratos denominados en yuanes buscan potenciar la influencia de China en el mercado del oro.
Algunos países podrían ver el almacenamiento de oro en China como una forma de diversificar sus reservas y protegerse contra sanciones internacionales. Sin embargo, expertos señalan que optar por Beijing implica renunciar a la liquidez y facilidad de operaciones que ofrece el mercado de Londres, que actualmente lidera en servicios de custodia y transacciones en oro.
En este escenario, China avanza en su objetivo de consolidarse como un actor clave en el mercado global del oro y fortalecer su posición financiera a nivel mundial. La estrategia de custodiar reservas de otros países extranjeros a través de la Bolsa de Oro de Shanghái marca un paso significativo en este proceso de desdolarización y diversificación de activos financieros bajo el amparo de esta potencia económica en ascenso.