Electromovilidad acelera en Chile: transporte público suma un alza del 350% en buses eléctricos desde 2022

El Ministerio de Transportes proyecta que el 68% de la flota nacional será eléctrica antes de fin de década, consolidando a Chile como referente regional en movilidad sustentable

El avance de la electromovilidad en el transporte público chileno mantiene un ritmo sostenido de crecimiento. Según informó el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), la cantidad de buses eléctricos en operación en el país aumentó un 350% desde 2022, alcanzando una presencia de 2.765 unidades adicionales en los últimos tres años. Con ello, los vehículos eléctricos ya representan el 55% del parque total, que suma cerca de 6.500 buses a nivel nacional.

El ministro Juan Carlos Muñoz destacó que estas cifras reflejan “una transformación estructural en la forma en que nos movemos como país”, aludiendo al compromiso gubernamental por descarbonizar la matriz de transporte público y reducir la dependencia de combustibles fósiles.

Expansión regional del transporte limpio

Hasta hace algunos años, la movilidad eléctrica se concentraba casi exclusivamente en la capital. Sin embargo, el mapa ha cambiado drásticamente. A la fecha, nueve ciudades regionales cuentan con flotas eléctricas integradas a sus sistemas urbanos: Santiago, Copiapó, Valparaíso, Antofagasta, Coquimbo y La Serena, Rancagua, Puerto Montt, Concepción y Temuco.

Estas incorporaciones se enmarcan dentro del programa de expansión de electromovilidad del MTT, que busca fomentar la descentralización del transporte limpio, instalando infraestructura de carga y talleres especializados en regiones. “La meta es que el acceso a una movilidad sostenible no sea privilegio de algunas comunas, sino una realidad para todos los chilenos”, señaló Muñoz.

Nuevos modelos y capacidad ampliada

El anuncio coincidió con la presentación de los primeros buses eléctricos articulados de la empresa Metbus, que comenzarán a circular próximamente en el sistema de transporte metropolitano. Estos nuevos modelos, con capacidad para transportar hasta 140 pasajeros, serán destinados a corredores de alta demanda, contribuyendo a mejorar la eficiencia del servicio y reducir la congestión.

El MTT indicó que los buses cuentan con autonomías superiores a los 300 kilómetros, climatización eficiente y sistemas de monitoreo en tiempo real. Además, cada unidad permitirá una reducción estimada de 80 toneladas de CO₂ al año, en comparación con sus equivalentes diésel.

Objetivo 2030: más de dos tercios de flota eléctrica

En el horizonte de mediano plazo, la cartera de Transportes proyecta que el 68% del total de buses del país será eléctrico hacia 2030. Para ello, se trabaja en conjunto con operadores privados, municipios y empresas distribuidoras de energía, en la creación de un ecosistema de electromovilidad que combine eficiencia económica, sostenibilidad ambiental y accesibilidad social.

El ministro Muñoz subrayó que la incorporación masiva de buses eléctricos no solo apunta a metas climáticas, sino también a mejorar la calidad de vida urbana, al reducir la contaminación acústica y atmosférica. “Los beneficios son múltiples: ciudades más limpias, viajes más confortables y una experiencia de transporte más moderna y silenciosa”, afirmó.

Chile como referente regional

Con el crecimiento actual, Chile se consolida como líder latinoamericano en transporte público eléctrico, superando a países como Brasil, México y Colombia en proporción de flota activa. De acuerdo con el MTT, esta expansión ha sido posible gracias a un modelo de financiamiento mixto, que combina inversión pública con participación privada en la compra, operación y mantenimiento de las unidades.

Además, el país ha establecido alianzas con fabricantes internacionales, como Yutong, BYD y King Long, para garantizar la disponibilidad de tecnología y repuestos, y fortalecer la capacitación técnica de personal local.

Desafíos de infraestructura y suministro

No obstante, el avance no está exento de desafíos. La expansión de la red eléctrica y la instalación de puntos de carga rápida continúan siendo prioridades para garantizar la operatividad continua de las flotas regionales. El MTT trabaja junto al Ministerio de Energía y las empresas distribuidoras para fortalecer la infraestructura de carga y almacenamiento, especialmente en regiones del norte y sur del país, donde las distancias son mayores.

Asimismo, se busca incorporar energías renovables no convencionales (ERNC) en los sistemas de carga, para que la electromovilidad mantenga coherencia con los objetivos de carbono neutralidad establecidos en la Estrategia Nacional de Electromovilidad 2021–2040.

Una transición en marcha

La expansión de la electromovilidad en el transporte público chileno representa más que un cambio tecnológico: es una transformación cultural y económica que redefine la movilidad urbana. Con una flota en rápido crecimiento, nuevos actores regionales y metas ambiciosas para la próxima década, Chile avanza hacia un modelo de transporte más limpio, eficiente y sostenible, que ya marca la pauta en la región.

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