Glencore (LON: GLEN) cerrará sus dos minas de cobre restantes en Mount Isa, Queensland, la próxima semana, poniendo fin a más de seis décadas de operaciones y marcando su salida de la producción de cobre en Australia.
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El cierre, anunciado en octubre de 2023, incluye las minas de cobre de Mount Isa y operaciones asociadas, como fundiciones y concentradoras.
Se estimó inicialmente que la pérdida de empleos superaría los 1.200, pero Glencore revisó la cifra en abril a alrededor de 500, mencionando avances en la reubicación de la fuerza laboral. «También estamos trabajando activamente para reubicar a la mayor cantidad de personas posible en los próximos meses», dijo Sam Strohmayr, director de operaciones de los activos de zinc y cobre de Glencore en Australia en ese momento.
Un memorando interno circulado esta semana por Troy Wilson, director de operaciones interino de Glencore Australia, confirmó que la empresa se acerca a un punto crítico en sus operaciones de procesamiento y necesita una intervención gubernamental urgente. Glencore está considerando cerrar la fundición de cobre y la refinería de Townsville cercanas, y podría ofrecer a los gobiernos una participación en equidad para mantenerlas funcionando.
«Glencore está buscando urgentemente detalles del gobierno federal sobre su estrategia nacional de fundición/refinación», escribió Wilson según The Townsville Bulletin.
Durante meses, la empresa suiza ha presionado a los gobiernos estatales y federales para obtener apoyo para mantener la fundición en funcionamiento, la cual procesa minerales de terceros de empresas como BHP. Sin embargo, Suresh Vadnagra, un ejecutivo senior de Glencore, dijo que la última propuesta del gobierno de Queensland no es suficiente. «Se está agotando el tiempo», comentó a The Australian. «Necesitamos saber si hay una solución viable por parte de los gobiernos o si empezamos a planificar la transición de la fundición y refinería de cobre a mantenimiento.»
Vadnagra delineó tres posibles caminos: apoyo directo del gobierno para cerrar la brecha económica, una empresa conjunta con Glencore o un cese hasta que mejoren las condiciones del mercado.
«No subsidiar dividendos»
El ministro de Recursos Naturales y Minas de Queensland, Dale Last, defendió la posición del estado. «El Gobierno de Queensland ha presentado una oferta genuina y responsable para ayudar a asegurar el futuro de la fundición de cobre de Mount Isa y la refinería de Townsville», informó a Bloomberg News, señalando que también se necesita una respuesta federal.
Last enfatizó que el estado no «firmará un cheque en blanco para una empresa multinacional que devolvió $2.2 mil millones a sus accionistas hace unos meses.»
Wilson dijo en junio que ya no existe «una competencia justa» con China, señalando los significativos subsidios para las fundiciones chinas. Glencore espera tomar una decisión final sobre la fundición para finales de septiembre.
La fundición de Mount Isa procesa actualmente más de un millón de toneladas de concentrado anualmente de toda Australia. Su posible cierre refleja una crisis más amplia en el sector.
A pesar de las sólidas perspectivas a largo plazo para el cobre, las fundiciones occidentales, muchas de ellas propiedad de Glencore, están bajo presión debido a la caída de los cargos por tratamiento y refinación, escasez de minerales y la feroz competencia de las instalaciones chinas.
El memorando a los trabajadores se produce después de la decisión de Glencore de vender su mina de zinc Lady Loretta y terrenos asociados a Austral Resources Australia (ASX: AR1) a principios de esta semana.
