La Operación Renta 2025 cierra pronto, exponiendo a infractores a serias multas por no declarar a tiempo.
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¿Quiénes deben realizar la declaración de renta?
La declaración de renta es obligatoria para varias categorías de contribuyentes en Chile. Este trámite es esencial para cumplir con las obligaciones tributarias del país.
- Personas con ingresos anuales superiores a $10.901.628,01, excluyendo aquellos que provengan de un único empleador.
- Individuos que hayan tenido más de un empleador o pagador durante el año fiscal.
- Trabajadores a honorarios que buscan cobertura parcial para sus cotizaciones previsionales.
- Quienes solicitaron el Préstamo Solidario en los años 2020 o 2021, pues deben calcular y pagar las cuotas en esta operación.
- Emprendedores que iniciaron actividades en 2024 y recibieron ingresos por ventas o servicios.
- Todas las empresas, sin excepción, deben presentar su Declaración de Renta.
Consecuencias de no realizar la declaración
Ignorar la obligación de declarar rentas tiene consecuencias serias. El Servicio de Impuestos Internos (SII) tiene estipuladas sanciones específicas para los infractores.
Los contribuyentes que no cumplan con esta obligación serán citados a las unidades del SII y registrados como «No declarantes F22», situación que les impedirá realizar diversos trámites significativos con el Servicio.
Además, el Código Tributario en su Artículo 97 establece multas por retardo u omisión en la presentación de declaraciones. Estas sanciones comienzan con un diez por ciento de los impuestos resultantes y pueden incrementarse dos por ciento por cada mes de atraso, con un máximo del treinta por ciento de los impuestos adeudados si el retardo supera los cinco meses.
Plazo final para la declaración
El último día para realizar la Operación Renta 2025 es el 9 de mayo. Se insta a todos los obligados a cumplir con este requerimiento antes de la fecha límite para evitar las sanciones mencionadas.
Realizar esta declaración a tiempo no solo es una responsabilidad fiscal, sino también una medida que garantiza la continuidad de los beneficios y derechos como contribuyente.
