El precio del cobre alcanza su mayor incremento semanal desde junio debido a la escasez de oferta. Crisis global en la producción impulsa la demanda.
Los desafíos en la oferta de cobre han marcado una semana de alta volatilidad en el mercado. La tragedia en la mina Grasberg de Freeport-McMoRan, que derivó en fuerza mayor en los contratos de suministro, y el cese operativo en una planta de Hudbay Minerals Inc. en Perú han agravado la escasez.
Olga Savina, analista de materias primas de BMI, destacó: «El mercado del cobre ha enfrentado diversas crisis de suministro este año. Cualquier demora prolongada en la entrega de cobre podría fortalecer la tendencia alcista hasta el 2026».
Las perturbaciones en América del Sur representan amenazas adicionales para el suministro de cobre. China, por su parte, mantiene una amplia expansión en la capacidad de fundición, presionando los precios y desafiando la estabilidad de la industria.
El precio del cobre cerró en 10.181,50 dólares por tonelada en Londres, con una ganancia semanal del 1,9%. La incertidumbre persiste en los mercados globales, mientras se observa un panorama competitivo en la fundición de cobre en China, generando preocupaciones en la economía del sector.