Más de la mitad de los trabajadores reconoció que pedir un aumento es una prioridad este año. Sin embargo, ¿qué elementos están en juego cuando se inicia una negociación salarial?
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En medio de la compleja situación económica que vive el país, la negociación salarial es uno de los temas fundamentales cuando se habla de mercado laboral. Ya sea en un proceso de selección para un nuevo empleo o en el actual cargo, todo trabajador debe encarar una negociación de este tipo. Y saber reconocer sus claves y las tendencias del mercado es una tarea que puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso.
Entre quienes ya están trabajando, el 53% reconoció sus intenciones de iniciar una negociación salarial durante este año, según un sondeo realizado por la empresa de soluciones de talentos Robert Half.
Según el director asociado de la consultora, Caio Arnaes, “la negociación salarial es un tema estratégico, que presenta desafíos tanto para los profesionales como para las empresas” y “hacerlo correctamente, conlleva beneficios tanto para quien lo solicita como quien lo concede”.
¿Qué factores están en juego?
Aunque el mercado laboral no contrate con la intensidad que lo hizo durante el año pasado, existen puestos claves, donde las empresas necesitan talentos en áreas clave, por lo que los profesionales encontrarán espacio para negociar un ascenso o una incorporación. “No hay que olvidar que las empresas reconocen el impacto negativo de una mala contratación, lo que permite que los talentos tengan buenas perspectivas para negociar mejores salarios”, aseguró Arnaes. “La clave está en pedir lo justo y ofrecer lo que las empresas están buscando para llegar a un acuerdo viable”, recalcó Arnaes.
Definir cuánto se quiere ganar es un factor imprescindible. Para eso, la recomendación inicial es establecer una banda salarial que considere un piso salarial mínimo al que se está dispuesto a aceptar y la cifra deseada. Quienes están trabajando deben considerar el salario que se recibe actualmente y aquellos que están cesantes, considerar el monto que recibían en su último trabajo. Por último, para quienes están buscando empleo es recomendable establecer el nivel de urgencia o tiempo que llevan buscando un nuevo trabajo, el nivel de interés por la empresa o el cargo y si están participando en más de un proceso de selección.
Quienes desean lograr un aumento deben establecer con claridad su idoneidad para el cargo, sus logros anteriores y capacidades para aportar valor a la empresa. Otro factor relevante son las condiciones necesarias de base, por ejemplo, la modalidad de trabajo, ubicación, jornada, movilidad y nivel de responsabilidad. Y además de eso los eventuales beneficios que pueda ofrecer la empresa.
“En muchos casos, la situación económica no permite llegar a un salario más alto. Sin embargo, ahí entran en juego los beneficios, que pueden convertirse en verdaderos imanes para atraer o retener a los mejores talentos”, enfatizó el ejecutivo.
Según un estudio de Robert Half publicado recientemente, los tres beneficios más comunes que están ofreciendo las empresas a sus trabajadores son los seguros complementarios de salud (83%), notebook (77%) y celular + chip (76%). Los estacionamientos costeados por la organización (50%) y el cuidado dental (44%) son los otros dos que completan los cinco beneficios más comunes.
“Las empresas están alineadas con algunos de los beneficios más valorados por los colaboradores, como el seguro complementario de salud y el cuidado dental”, afirmó Arnaes. Sin embargo, en materia de beneficios, la tendencia apunta hacia negociar y buscar alternativas viables para ambos lados, que permitan acuerdos satisfactorios para ambas partes.
