Las exportaciones de cobre de China aumentarán en entregas excepcionales a los depósitos de la LME

El estallido de las exportaciones confirma el débil repunte económico de China, con la fabricación y la construcción aún preparándose después de las interrupciones relacionadas con Covid durante el año pasado. Los inventarios del mercado se han disparado recientemente, y una pregunta clave es si la ola de envíos salientes se extenderá más allá de este mes.

China importa enormes cantidades de cobre en diversas formas, pero el metal refinado ocasionalmente sale cuando hay demasiada oferta interna y no suficiente en otros lugares. Las diferencias de precios ahora hacen que sea más lucrativo vender al menos algún material en el mercado mundial.

Unas 13.000 toneladas que aparecieron este mes en almacenes en Busan, Corea del Sur, provienen de fundiciones chinas, dijo una de las personas.

China fijó un objetivo de crecimiento para este año de alrededor del 5%, ampliamente considerado un objetivo modesto, ya que la economía más grande de Asia enfrenta vientos en contra persistentes. Una recuperación lenta sería un duro golpe para los inversores alcistas que dijeron que un repunte de la fabricación y la construcción en China impulsaría los precios al alza.

Hay algunas señales de que la demanda de cobre en el país se está recuperando. Los inventarios en bolsa han comenzado a caer y el índice manufacturero de la nación para febrero registró su lectura más alta en más de una década. Las fundiciones chinas no tienen una idea clara sobre las exportaciones futuras, ya que las perspectivas internas siguen siendo inciertas, dijeron las personas.

Es probable que el metal exportado vaya a los cobertizos de la LME en Corea del Sur u otros lugares asiáticos, y los volúmenes se suman a los suministros contratados, dijeron las personas.