Nuevo hallazgo en minas de carbón podría impulsar transición energética global

Por:
Jonathan Naveas
Publicado porJonathan Naveas
Editor en Revista Digital Minera
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Un reciente hallazgo de minerales raros en minas de carbón de Estados Unidos podría marcar el inicio de nuevas oportunidades para la industria minera global. Según un informe basado en estudios realizados en la cuenca del carbón de Uinta, ubicada entre Colorado y Utah, estas zonas presentan concentraciones significativas de elementos clave para el desarrollo de tecnologías limpias y energéticas.

Descubrimiento estratégico: minerales raros en minas de carbón

Un equipo liderado por Lauren Birgenheier, profesora asociada del Departamento de Geología y Geofísica de la Universidad de Utah, ha evaluado más de 3.500 muestras provenientes de diez minas activas. Dicho análisis reveló que las formaciones de lutita y limolita, que rodean los yacimientos de carbón, contienen concentraciones de hasta 200 partes por millón de minerales raros. Este hallazgo pone a Utah y Colorado en una posición destacada, ya que se aproximan al umbral de 300 partes por millón necesario para una explotación económicamente viable, según el Departamento de Energía de Estados Unidos.

El enfoque propuesto por Birgenheier subraya una oportunidad estratégica: “Si ya se está moviendo roca, ¿por qué no aprovechar el proceso para obtener recursos destinados a la transición energética?”. Este planteamiento busca optimizar la extracción utilizando las infraestructuras existentes, reduciendo costos operativos e impactos ambientales que conllevan nuevas operaciones mineras.

¿Los minerales raros y las tierras raras son lo mismo?

Es importante aclarar que los minerales raros no son lo mismo que las «tierras raras». Estas últimas se refieren a 17 elementos químicos (escandio, itrio y los 15 lantánidos) presentes en minerales como la monacita. En cambio, el término «minerales raros» es más amplio e incluye otros minerales realmente escasos en la naturaleza, como el tántalo, el niobio, el indio y el galio, que no forman parte del grupo de las tierras raras.

Impacto en minería y transición energética

Este descubrimiento tiene el potencial de transformar la minería en Estados Unidos. Según Michael Vanden Berg, del Utah Geological Survey, incrementar mínimamente la extracción de las capas de roca superior e inferior en vetas de carbón podría permitir la recuperación de estos minerales, generando una doble rentabilidad. De este modo, se mantendría la operación carbonífera mientras se incorporan elementos esenciales para la industria tecnológica y energética.

En este contexto, la iniciativa Carbon Ore, Rare Earth and Critical Minerals Initiative (CORE-CM) surge como un actor central. Este programa federal busca revitalizar las regiones mineras mediante el aprovechamiento integral de sus recursos. Para ello, propone:

  • Evaluar recursos disponibles y cerrar vacíos de información geológica.
  • Diseñar estrategias basadas en infraestructuras regionales, promoviendo desarrollo económico local.
  • Fomentar la innovación tecnológica y la colaboración entre empresas y universidades.
  • Impulsar la formación de trabajadores en el manejo de minerales críticos.

Perspectivas futuras

Entender la procedencia de estos minerales raros es esencial. Los estudios señalan que provienen de antiguas cenizas volcánicas acumuladas en turberas millones de años atrás, cuyos compuestos se concentraron en las formaciones más finas de la cuenca carbonífera. Este dato refuerza el enfoque de aprovechar yacimientos existentes en lugar de abrir nuevas explotaciones.

Por último, los próximos pasos incluyen cuantificar el volumen total de recursos disponibles y desarrollar tecnologías de separación y refinado que determinen su viabilidad industrial. De materializarse, esta iniciativa consolidaría a Estados Unidos como un actor relevante en la extracción de minerales esenciales para la transición energética global.

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