Las llamadas comerciales no deseadas, conocidas como spam telefónico, han sido motivo constante de quejas entre los usuarios en Chile. Estudios recientes revelan que el país ocupa el segundo lugar a nivel mundial en la recepción de este tipo de llamadas, con un promedio de 23 llamadas no deseadas por usuario, solo superado por Brasil.
Relacionados:
Fin al spam: nueva normativa en Chile
Para enfrentar esta situación, la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) anunció que a partir de agosto entrará en vigencia una norma técnica que permitirá identificar claramente las llamadas masivas y automatizadas, tanto solicitadas como no solicitadas. Esta medida busca otorgar mayor transparencia y proteger a los usuarios de fraudes y molestias.
Prefijos para identificar llamadas
La normativa establece dos bloques de numeración especial (prefijos) para diferenciar las llamadas:
- Prefijo 600: identificará las llamadas comerciales solicitadas, como comunicaciones de clínicas, bancos o instituciones con las que el usuario mantiene relación.
- Prefijo 809: se asignará a las llamadas comerciales no solicitadas, facilitando al usuario identificar campañas de televenta o promociones automáticas.
Cómo funcionará el sistema
El subsecretario de Telecomunicaciones, Claudio Araya, explicó que este cambio permitirá que, cuando los usuarios reciban llamadas de instituciones con las que mantienen contacto, estas lleguen identificadas con el prefijo 600. En tanto, si reciben llamadas no solicitadas, estas aparecerán con el prefijo 809, permitiendo reconocer fácilmente el origen y tomar decisiones informadas.
Además, Araya destacó que este sistema brindará mayor seguridad, ya que las empresas deberán identificarse con un número autorizado, lo que permitirá a las personas reconocer instituciones legítimas y, en caso de estafas, contar con información para denunciar.
