El alto precio del mineral y sus buenas expectativas están detrás, pero también el incierto futuro del litio.
Los precios históricos que ha registrado el cobre han despertado el apetito de varias empresas e inversionistas para aprovechar las buenas perspectivas que existen del mineral en el corto y mediano plazo. En la última conferencia con analistas, la minera no metálica SQM reconoció que están interesados en ingresar al mercado del cobre, considerando la extensa cantidad de pertenencias mineras que poseen. “Parece que va a ser una tendencia a largo plazo, eso espero.
Sí, realizamos alguna actividad interna con el fin de desarrollar una actividad lógica para encontrar algunos recursos potenciales de cobre en nuestra tierra. Y claro, tuvimos algunos acuerdos con partes que buscan cobre. Creo que será más efectivo en los próximos seis meses, considerando lo que está sucediendo con los precios. Tiene que ser algo muy importante en el futuro si encontramos algo, pero sí, somos bastante activos con estas ideas”, aseguró el CEO de la minera, Ricardo Ramos.
Eso sí, desde la minera también remarcaron que tener este precio del cobre tan alto significa que la presión de la mano de obra en el norte de Chile está subiendo y lo mismo con los contratistas, “es algo en lo que estamos trabajando para mejorar nuestros productos, para aumentar nuestra productividad con el fin de evitar cualquier costo adicional”, aseguraron. No es la primera vez que la minera busca ampliar sus horizontes.
En 2016, la compañía declaraba su interés en ingresar a la gran minería del cobre o del oro, según consta en la página web de la minera. Y es que cuentan con un centenar de depósitos y áreas de exploración en etapas prospectivas iniciales para cobre, oro, plata y otros metales básicos para exploración directa o a través de joint ventures. Los renovados comentarios de SQM se dan luego de varias jornadas en que las acciones de la minera han venido a la baja, tras conocerse los resultados de la elección de constituyentes, acumulando una caída del 18% desde esa fecha.
Justamente en ese escenario, expertos ven esta estrategia como una posibilidad de la minera de poder encontrar alternativas al litio, considerando la fragilidad de esta industria en comparación a la del cobre, sobre todo teniendo en cuenta que los contratos de arrendamiento del salar de Atacama vencen en 2030 y la configuración de la Convención Constitucional.
De todos modos, expertos prevén que desarrollar una iniciativa como esta desde cero podría tardar hasta una década, lo que podría adelantarse en caso de que la demanda por cobre siguiera creciendo.
Fuente: El Mercurio