Una nueva fase se abre en la disputa entre Berkeley Energía y España, ya que la compañía minera australiana ha decidido llevar el conflicto por la mina de uranio en Salamanca a un arbitraje internacional.
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Una disputa prolongada
Tras varios años de enfrentamientos y obstáculos, Berkeley Energía ha optado por recurrir al arbitraje internacional en su conflicto con España sobre la aprobación final para su proyecto minero en Salamanca.
La aprobación preliminar del proyecto Retortillo se remonta a 2013, pero desde entonces ha enfrentado una serie de desafíos, incluida la oposición local y preocupaciones regulatorias de seguridad.
La inversión estimada de más de 250 millones de euros y la creación de más de 2.500 empleos en la región podrían estar en juego debido a esta disputa.
El rechazo y la respuesta de Berkeley
El Ministerio de Energía español rechazó el proyecto en 2021, respaldado por un dictamen negativo del Consejo de Seguridad Nuclear, que resaltó preocupaciones sobre la fiabilidad de los análisis de seguridad del sitio radiactivo.
Berkeley Energía, con sede en Londres, apeló esta decisión, pero en febrero de 2023, el Ministerio confirmó su negativa.
Berkeley ha decidido presentar una solicitud de arbitraje al CIADI del Banco Mundial, con el respaldo de equipos legales especializados.
Compromiso y perspectivas
A pesar de la disputa, Berkeley Energía reitera su compromiso con el proyecto de Salamanca y su disposición al diálogo con España para encontrar una solución mutuamente beneficiosa.
Mientras tanto, las acciones de Berkeley experimentaron un aumento notable en Madrid y Londres, lo que sugiere la atención del mercado sobre el resultado de esta disputa.
