En un nuevo hito para el sector, Grandleasing, empresa experta en leasing operativo y electromovilidad, parte del Grupo Jedimar, entregó a Enaex la primera flota en el país de camionetas eléctricas 4×4 R7 (Voltera). Se trata de 10 vehículos 4×4 que serán destinados a la minería.
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Un paso hacia la sostenibilidad en la minería chilena
La partida fue suministrada oficialmente por Grandleasing a Enaex en un evento en el Museo Jedimar. «Estamos muy satisfechos con esta operación, ya que no sólo estamos cumpliendo con el requerimiento de un cliente, sino que también estamos aportando un granito de arena a la sostenibilidad de la minería siendo pioneros en sumar estas camionetas 4×4 cero emisiones», dijo Claudio Meza, gerente general de Grandleasing.
En el evento, se firmó una alianza entre Enaex y Voltera, empresa chilena de electromovilidad, que permitirá a Enaex recibir un beneficio económico por cada tonelada de CO2 que deje de emitir su nueva flota. «Otro gran beneficio con la nueva flota R7 4×4 100% eléctrica vía Voltera es que se podrá acceder de manera inédita a un programa internacional que retribuye económicamente a quienes utilicen vehículos eléctricos. ZeroCa y Voltera firmaron el año pasado una alianza que nos permitirá comercializar la reducción de CO2 a Suiza, obteniendo no solo un beneficio medioambiental, sino que también económico», dijo Aníbal Carracedo, gerente Comercial de Grandleasing.
Compromiso con la sustentabilidad y la reducción de la huella de carbono
Enaex es una compañía comprometida con la reducción del impacto ambiental de sus operaciones y el uso de tecnologías sostenibles. Para Grandleasing, la electromovilidad es fundamental en su estrategia. La empresa no solo ofrece una amplia gama de vehículos eléctricos, desde camiones y buses hasta furgones y automóviles, sino que también implementa iniciativas para apoyar a sus clientes en la transición hacia la movilidad eléctrica y la reducción de la huella de carbono.
La entrega de la primera flota de camionetas eléctricas a Enaex marca un hito en la industria minera chilena y demuestra el compromiso de las empresas con la sostenibilidad y la eficiencia. Estos vehículos cero emisiones no solo reducirán el impacto ambiental de las operaciones mineras, sino que también generarán beneficios económicos gracias al programa internacional de reducción de CO2. Con este paso hacia la electromovilidad, se espera que más empresas en Chile adopten tecnologías sostenibles y contribuyan a la protección del medio ambiente.
