“El consumo energético minero continúa en alza”
La minería del cobre en Chile consolidó en 2024 un hito relevante en su camino hacia la sostenibilidad: el 78% de la electricidad utilizada por el sector provino de fuentes renovables. Así lo reveló el más reciente informe de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco), documento que detalla la evolución del uso energético en 49 faenas que representan el 98% de la producción nacional. A la vez, el estudio confirma que el consumo energético minero continúa en alza, impulsado por los crecientes desafíos operacionales y geológicos que atraviesa la industria.
Crecimiento sostenido del consumo energético
El consumo total de energía de la minería del cobre alcanzó 199.452 terajoules (TJ) en 2024, lo que representa un incremento acumulado del 54% desde 2010. Este aumento contrasta con el avance de solo 1,6% en la producción física de cobre durante el mismo período, evidencia de procesos cada vez más intensivos y demandantes.
La electricidad concentró el 51,3% del total, equivalente a 102.307 TJ, mientras que los combustibles representaron el 48,7% restante. Las operaciones más energointensivas continúan siendo la minería a rajo abierto (42% del total), las plantas concentradoras (29%) y los procesos de lixiviación (10%).
Antofagasta: el polo energético minero del país
La región de Antofagasta se reafirmó como el epicentro energético de la minería chilena. En 2024 concentró el 58% del consumo total, el 63% del uso de combustibles y más de la mitad de la electricidad utilizada por el sector.
Un factor estructural es el uso creciente de agua de mar para procesos industriales. Solo la captación, impulsión y desalación de este recurso exigió 11.308 TJ en 2024, equivalentes al 11% de todo el consumo eléctrico de la minería.
Avance decisivo de las energías renovables
El informe destaca el fuerte avance del suministro eléctrico verde: 78% de la electricidad utilizada por las faenas mineras proviene hoy de fuentes renovables, cuatro puntos más que en 2023. La gran minería privada lidera el proceso con una cobertura del 96%, seguida por ENAMI (84%) y la mediana minería (70%).
Este progreso ha sido impulsado por la renegociación de contratos eléctricos hacia PPA verdes, la mayor oferta de energía solar y eólica en el Sistema Eléctrico Nacional y el uso creciente del sistema de certificación RENOVA, que valida la trazabilidad del origen renovable.
Electromovilidad y eficiencia: los próximos pasos
En línea con la Ley de Eficiencia Energética, un 76% de las operaciones mineras ya cuenta con planes de electromovilidad orientados al transporte de personal y carga ligera. Codelco destaca con una cobertura del 100% en esta materia.
Pese a los avances, los desafíos persisten. La disminución de las leyes minerales —que cayeron de 0,75% en 2010 a 0,62% en 2024—, la explotación de yacimientos más profundos y la transición hacia minerales sulfurados están elevando la demanda energética. El sector requirió 36,2 gigajoules para producir una tonelada de cobre en 2024, un 50% más que hace quince años.
La minería se mantiene como uno de los motores de la transición energética del país, con avances significativos en energías limpias y trazabilidad del suministro. El desafío de la próxima década será contener el crecimiento del consumo y profundizar la eficiencia para alcanzar la meta nacional de carbono neutralidad al 2050.

