Todos los vehículos de la temporada usarán gasolina sintética de la planta HIF Haru Oni en Magallanes, impulsados por energía eólica.
En la fecha del martes 20 de mayo del 2025 se anunció que los automóviles participantes en la Porsche Mobil 1 Supercup (PMSC) 2025 en Europa emplearán combustibles renovables. Por segundo año consecutivo, los Porsche 911 GT3 Cup competirán con una base de gasolina sintética proveniente de la planta Haru Oni de HIF Global, ubicada en la Región de Magallanes.
La Supercup, una serie de carreras ligada al Campeonato Mundial de Fórmula 1, inició el 16 de mayo en Ímola (Italia) y se extenderá hasta septiembre, incluyendo paradas en Mónaco, España, Austria, Hungría, Bélgica y Países Bajos. En esta ocasión, el combustible utilizado será exclusivamente e-Combustibles generados con la energía eólica característica de Magallanes, gracias a un equipo totalmente magallánico.
Victor Turpaud, gerente regional Latam de HIF Global, destacó: «Exportamos más de 46.600 litros de e-Combustible para la Porsche Mobil 1 Supercup 2024 y otros eventos de demostración de Porsche. Este año se emplearán más de 43.000 litros, demostrando el avance concreto de los combustibles a base de hidrógeno verde para la descarbonización».
Los automóviles de competición han sido históricamente impulsores de innovaciones que luego se expanden al mercado automotriz. HIF Global está enfocada en escalonar esta tecnología, con proyectos en marcha en Chile, Estados Unidos, Uruguay, Australia y Brasil, buscando popularizar pronto esta gasolina sintética.
El e-Combustible se somete a rigurosos controles de calidad en Chile, con monitoreo continuo y análisis de muestras diarias. Una vez en Europa, se refina con aditivos hasta alcanzar los estándares de combustibles de carrera, siempre basados en e-Combustibles.
La producción de e-Combustibles involucra la utilización de electrolizadores alimentados por energía renovable para separar el hidrógeno del oxígeno en el agua. Luego, el hidrógeno se combina con dióxido de carbono reciclado para producir un combustible sintético compatible con los motores y la infraestructura existente, abriendo nuevas posibilidades para la movilidad sustentable en la industria automotriz.
