SQM informó este jueves que tiene planes de transferir sus concesiones mineras de litio en el norte del país a la empresa conjunta que formará junto a la cuprífera estatal Codelco, para explotar las reservas del mineral considerado estratégico por el Estado.
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En una declaración tras una junta extraordinaria con accionistas de SQM, el segundo mayor productor de litio del mundo declaró además que pretende transferir sus concesiones mineras en el Salar de Maricunga -también en el norte del país- a la empresa conjunta con Codelco, que se denominará Minera Tarar.
«Este acuerdo se basa principalmente en utilizar las importantes sinergias que se producen al coordinar esfuerzos de ambas compañías en la operación del Salar de Atacama», dijo en la publicación el gerente general de SQM, Ricardo Ramos, en relación al memorando de entendimiento no vinculante firmado por las partes.
Las partes anunciaron ayer miércoles una extensión del plazo recogido en un memorando de entendimiento para firmar acuerdos sobre las concesiones mineras hasta el 31 de mayo, en vista de la complejidad de las conversaciones en curso. Inicialmente, el plazo se había dispuesto al 31 de marzo.
La asociación
Ambas empresas anunciaron a fines de diciembre la creación de una asociación público-privada para extraer el litio en el codiciado Salar de Atacama hasta 2060, un convenio que busca dar a Chile estabilidad en el escenario mundial de la transición energética.
Codelco, que es el mayor productor de cobre del mundo, fue designado por el Gobierno para liderar la estrategia destinada a aumentar el control estatal en la producción de litio, un mineral clave en la fabricación de baterías de autos eléctricos.
La asociación con SQM se estructurará a través de una sociedad común con una participación mayoritaria del Estado chileno, de un 50% más una acción.
El contrato de SQM con la agencia estatal de fomento Corfo para explotar el litio del Salar de Atacama expiraba en 2030. SQM es uno de los dos únicos productores de litio en Chile -junto a la estadounidense Albemarle- y el cercano vencimiento de su contrato de arriendo de pertenencias estatales lo convirtió en la prioridad de las negociaciones.
